Dasher golpea el escritorio con frustración mirando la barrita del documento parpadeando burlonamente a media palabra que no terminaba de salir. Tiene la idea, tiene los diálogos y el motivo, pero simplemente no le sale lo que desea, el enojo y algo que no quiere admitir como tristeza trancan sus dedos a medio camino del teclado impidiéndole continuar. Suspira frotando sus ojos todavía sin creer lo increíblemente imbéciles que podían ser algunas personas.
Respira hondo, ve un capítulo de la nueva serie que lo tiene obsesionado y cuando se siente lo suficientemente relajado regresa al documento forzando las palabras sin muchas ganas de ponerse en empeño; si a nadie le va a importar su esfuerzo entonces no va a ponerle ninguno. Termina respirando hondo y sigue con lo que queda por escribir.
Una vez acabada su redacción siente la imperiosa necesidad de seguir despotricando solo para no dejarse llevar por la frustración y llorar, porque está demasiado desmotivado como para continuar con su proyecto y Ryan está tan furioso que en ese momento no es una buena guía. Sin embargo, se encuentra a si mismo siguiendo la frustración incapaz de conectar dos neuronas con sensatez a causa del sueño.
—Me encantaría seguir ayudando, pero sigo muy ofendido —escribe frotando sus ojos.
Siente su rostro caliente, los ojos le arden y sus párpados pesan como dos piedras. Ha dormido poco esa semana, ha dormido poco desde el inicio del semestre y simplemente ese día fue un desastre. Eso le terminó de desmotivar incluso distrayéndole de sus proyectos constantes; el sonido de su celular le hace parpadear tratando de despejarse para alejar el dolor de cabeza, acomoda su cabello y abre el chat.
—Ahora no Dasher, hablaremos mañana, hoy no estoy de humor —la respuesta de Ryan le hace sentirse mal, sus dedos tiemblan y debe luchar para no disculparse de aquí a la luna.
Ryan había tenido un día pesado, lo entiende perfectamente y no necesitaba que él también estuviese cargándole con sus quejas, aunque sienta que va a explotar si no lo hace. Simplemente respira hondo y sonríe para sí mismo como si quisiera convencerse de que todo estaba bien.
—Tranquilo, sólo necesito dormir —escribe estirándose. Empieza a cerrar documentos respirando lento para controlar sus emociones—, trata de descansar.
Va a cerrar y apagar todo, no le va a prestar atención a lo sucedido y simplemente dejará las cosas correr. Tal vez al día siguiente pueda hacer algo decente, tal vez los dos estén de mejor humor; con algo de suerte su dolor de cabeza pasará y podrá comportarse como un casi adulto.
Comments (0)
See all