P.O.V Narradora:

Shinyo y Lucian se encontraban en la habitación del ultimo nombrado jugando videojuegos a alto volumen para no escuchar los jodidos gritos de furia de Kimizuki. ¿Qué pasó? Se preguntaran pues mis queridos lectores volvamos un poco atrás para descubrir lo que pasó, lo que hizo que Kimizuki se alterara a tal punto de enfurecer.

Todo comenzó cuando llegaron a la casa de Lucian después de que los tres almorzaron, Kimizuki miro la hora para morderse un poco el labio inferior. Lucian lo vio y le dio una suave sonrisa.

-Ki-mi-zu-ki, deja de pensar en mi hermano y concéntrate en el juego que vas a a elegir. -Dijo señalando la pantalla del televisor ante eso se ganó una mala mirada del parte del azabache mayor.

-¡Calla! Todo es tú culpa, si hubieras leído el mensaje de Ashiro no estaría así. -Dijo molesto realmente no se podía concentrar, ni siquiera podía elegir bien un juego.

-Mmmm...¿Shion te gusta el hermano de Lucian? - Preguntó Shinyo viendo al par de amigos que se quedaron fríos ante esas palabras. Lucian sonrió y vio a Kimizuki esperando que respondiera.

-Yo... etto...¡Eso no importa!... Ya encontré el juego. -Dijo seleccionando el Smash bros, porque fue lo primero que encontró para distraer a su hermano menor. 

Pasaron jugando por tres horas y media en la habitación de Lucian, hasta que se oyó a alguien entrar a la casa pusieron pausa y Lucian como el buen amigo que no es, envió a Kimizuki a bajar para ir a averiguar quien era, a regañadientes Kimizuki bajo al primer piso con cuidado pero sin darse cuenta se termino resbalando por no pisar bien un escalón, espero el golpe de su caída pero este nunca llego había aterrizado en el pecho fuerte de nada más ni nada menos que de Ashiro, su crush, su platónico desde que era niño y el hermano mayor de su mejor amigo Lucian, si mis queridos lectores Shion Kimizuki tenia la suerte de su lado ese día, había esperado verlo durante mucho tiempo, para caer por ese escalón que no contó, sobre él, su pulso se había acelerado al darse cuenta que se trataba de él, Ashiro lo ayudo a ponerse de pie y le acaricio con cuidado la cabeza.

-Hey, Shion, ¿Te encuentras bien?¿No tienes algún rasguño? - Preguntó gentilmente mientras lo veía a los ojos, haciendo que en las mejillas del menor apareciera un bonito sonrojo.

-S-Sí, estoy bien, tranquilo.- Dijo con algo de nerviosismo al tenerlo cerca suyo.

-Entiendo, no sabia que estabas aquí. -Dijo acariciando su mejilla poniendo más nervioso a Kimizuki.

-¿Tú hermano no te dijo? -Pregunto viéndolo.

-No, si me hubiera dicho no me hubiera ido a otro lado solo para verte. -Dijo con coquetería que hizo sonrojar más al menor.

-Eres un idiota, ¿lo sabias?- Dijo inflando sus mejillas a veces sentía que solo jugaba con él pero no quería que eso fuera cierto.

-Me lo has dicho muchas veces así que si, por cierto, ¿Qué haces aquí? -Pregunto apachurrando las mejillas contrarias.

-Yo vine con mi hermano menor a jugar videojuegos con Lucian y ahora que lo digo debo volver con ellos, le diré a Lucian que llegaste.- Respondió dando media vuelta para subir las escaleras pero a penas había subido un par de escaleras cuando Ashiro lo agarro del brazo y lo atrajo hacia su cuerpo para abrazarlo sorprendiendo y haciendo sonrojar a Kimizuki.

-Shion no vuelvas con mi hermano.- Susurro en su oído apegandolo más a él, sorprendiendo más al menor.

- Pero Ashiro yo- -No termino de hablar porque el mayor lo beso en los labios para que dejara de hablar, Kimizuki correspondió el beso pero después de unos minutos se separo.- Ashiro...¿por qué? 

-Ya deberías saber la respuesta Shion.-Susurro cerca de sus labios para cargarlo al estilo princesa y llevarlo a su habitación, estando ahí cerro la puerta con el pie colocándose sobre Shion haciendo que este se altere un poco.

-Ashiro... no estoy listo para tener una relación sexual...-Susurro bajando la mirada haciendo que el mayor soltara una suave risa y le levantara el rostro con cuidado.

-No quiero tener sexo contigo Shion...Solo voy a consentirte a ver si ya te das cuenta con lo que quiero contigo realmente.- Susurro acariciando su mejilla y llenando de besos el rostro del menor haciendo que se sonrojara más y se dejara hacer.