La nave despegó dejándolos a su suerte, luego de escuchar un rugido a la distancia, Miila y Juhan prepararon sus armas, empezando a avanzar en posición de ataque.
Miila avanzaba de manera estratégica mientras Juhan lo hacía descuidadamente y haciendo ruido con sus botas al pisar la vegetación, luego de caminar un buen tramo, Miila se detuvo de pronto
-¿¡Quieres dejar de hacer… tanto ruido!?- Le reclamó en voz baja como indicando que debían avanzar en silencio – ¿No te dijeron que en estos casos lo mejor es actuar sigilosamente?-
Juhan se quedó quieto y sonriendo le dijo que nunca había recibido entrenamiento, que todo lo que sabía sobre hacer misiones lo había aprendido de Enya y de los juegos de video.
-¿No te entrenaron antes?- Preguntó Miila con un tono incrédulo –No puede ser posible que esté emparejada con un novato- Dijo frotándose la frente.
-¡Oye! ¡Los dos somos novatos!- Le respondió Juhan alzando la voz. En el momento que él dejo de hablar un segundo rugido se escuchó.
-Por favor… sólo guarda silencio- Insistió la chica haciendo una señal con la mano.
Con cuidado caminaron lo más rápido posible para alejarse del punto donde escucharon a la bestia, una vez a salvo Juhan sacó un dispositivo que les ayudaría a buscar una señal de ubicación.
-Bueno, menos mal… La señal apunta hacia allá- Suspiraron de alivio al ver la dirección que marcaba el aparato. Sin hacer más pausas siguieron su camino.
-Oye Miila, tú no pareces una novata- Comentó Juhan al ver como su compañera se movía en silencio y con una postura bien ejecutada -¿Por qué estás en el nivel 1?-
La chica se quedó pensando sin detenerse –Es porque no puedo ver bien- Respondió agachándose para pasar por debajo de una rama.
-No parece que tengas mala vista- La siguió el joven agachándose también.
En ese momento, la señal se intensificó y divisaron algo parecido a una caja a lo lejos, cuando se acercaron descubrieron que se trataba de la jaula del hámster, completamente destruida, como si algo hubiese arrancado una parte para sacar al animal de dentro.
-No puede ser… Llegamos tarde, algo se llevó a nuestro objetivo- Se lamentó Miila transmitiendo su sentir a Juhan, que en medio de su desilusión tuvo la curiosidad de investigar la jaula.
Poniéndose de pie, identificó un camino que iba desde la jaula hacia la selva, los árboles que estaban alrededor de ese camino habían sido empujados y algunos estaban arrancados del suelo.
-¿Qué estás haciendo?- Preguntó Miila al verlo concentrado
En ese momento, el joven comprobó que efectivamente, detalles pequeños como los que él estaba viendo pasaban desapercibidos a primera vista por Miila.
-Mira esto- Le hizo una seña para acercarse. Poniéndose sobre una de sus rodillas le indicó a Miila donde enfocar su vista.
-Si miras bien, la jaula no fue destruida por algo que se llevó al hámster- Hizo una pausa para asegurarse de que ella le seguía bien la explicación –Esto de aquí- Señaló un punto donde la jaula estaba destruida –Esto es un daño de dentro hacia afuera-
-¿De adentro hacia afuera?- Se quedó pensando la chica un momento, de pronto cayó en cuenta y comprendió lo que Juhan le quería decir -¡¿Te refieres a que fue el hámster quien se escapó de la jaula?!-
Los dos se pusieron de pie y se quedaron viendo el camino que Juhan había encontrado unos momentos antes.
-Pero aunque el hámster haya conseguido salir de la jaula… es imposible que haya causado tanto daño- Respondió Miila refutando la teoría de su compañero –Algo enorme se lo llevó y no sé por qué presiento que ese algo es-
En ese instante, el rugido se volvió a escuchar, esta vez muy cerca de ellos. Las ramas de los árboles se agitaron y pasos pesados enormes se aproximaban uno a la vez.
-¡Sea lo que haya sido, está por encontrarnos!- Exclamó Juhan preparando su arma.
Sin tener oportunidad de ocultarse, fueron sorprendidos por una criatura gigante que partió los árboles para salir a su paso, rugiendo al punto de ensordecerlos por un momento, se lanzó a atacarlos.
-¡No creas que te tengo miedo, monstruo!- Exclamó Miila empezando a disparar, sin atinar ninguno de sus tiros debido a que su objetivo estaba en movimiento.
-¡Estás fallando, Miila, demasiado!- Le gritó Juhan empujándola para esquivar un rasguño.
Miila se puso de pie rápidamente y cogió su arma, con la convicción de acertar en esta ocasión, de pronto Juhan empujó su arma hacia arriba para desviar su disparo.
-¿¡Qué estás haciendo!?- Le reclamó.
-¡Miila, mira con atención!-
-¡Eso hago! ¡Está vez no pienso fallar!- Le gritó de vuelta deteniéndose de golpe al encontrarse de frente con el monstruo -¡Imposible! ¿¡Esta criatura es el hámster que estamos buscando!?- Dijo identificando el pelaje del animal y comparándolo con el de la imagen que vieron en la oficina del comandante el día anterior.
Sin más remedio que huir, los dos corrieron para alejarse nuevamente de la bestia, encontrando las ruinas de una construcción enorme y antigua. Tomando un respiro, se refugiaron ahí para planear su siguiente movimiento.
-No lo entiendo ¿Qué se supone que es ese hámster?- Se preguntó Miila.
-Bueno, creo que ahora sabemos por qué tanto alboroto por recuperarlo- Dijo Juhan sacando de su bolsillo un par de balas de goma para reemplazar las que llevaba su arma.
Miila se recargó en una de las paredes de las ruinas y se dejó caer, dando un profundo suspiro se quedó sentada en el suelo –Mencionarte sobre mi falla en la vista fue como predisponerme a ser torpe, como cuando finalicé la prueba para entrar a NTi –
El joven alistó su arma y se dirigió a la selva de nuevo –Si te sientes insegura, es mejor que te quedes aquí, yo me encargaré del hámster-
-¿Estás bromeando, verdad?- Preguntó incrédula Miila –Voy a ir contigo-
Una sensación extraña recorrió la espalda de la chica, como un escalofrío que le puso alerta, poniéndose de pie se quedó mirando a su alrededor –Juhan ¿Sabes dónde estamos?-
-No, nunca había venido aquí ¿Por qué? ¿Pasa algo?- Insistió él.
La joven se concentró en la sensación extraña que tenía, sin avisar, impulsada por ese sentir, corrió hacia dentro de las ruinas siguió avanzando hasta toparse con una sala vacía también en ruinas, deteniéndose en medio se quitó los lentes para enfocar su vista en uno de los ventanales, en ellos se apreciaba el grabado de un león.
-¿Qué pasa, Miila?- Le gritó Juhan alcanzándola después de rato, quedándose impactado al ver el rostro de ella sin los anteojos -¿¡Q-qué le pasó a tu cara!?- Preguntó en voz alta.
Miila se puso rápido los lentes y antes de que pudiera responderle, la bestia arremetió contra ellos, destruyendo lo que quedaba de las ruinas.
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