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El desgraciado nadaba con rapidez y a Lewister se le estaba haciendo difícil el poder alcanzarlo, difícilmente podía creer que aquella caricatura pudiese tener aquel estado físico envidiable. Durante su juventud, fue un nadador excepcional que pudo haber competido en las olimpiadas; pero su deseo de servir en la fuerza sobrepasaba el sueño de estar en los juegos olímpicos. Aun seguía arrepentido por aquella decisión, sin embargo nunca dejó de practicar el nado. Una o dos veces por semana se dirigía a la piscina pública para entrenar su cuerpo, tenía la idea de que un cuerpo sin entrenar era una futura bala en su pecho. Lewister podía llegar a los dos metros en quince minutos; pero ese desgraciado lo aventajaba por muchos segundos, sin embargo notaba que se estaba aletargando un poco, al parecer se estaba cansando y, casi sin motivo alguno, se detuvo en seco.

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Los estaba dejando atrás y aun así no sabía a dónde ir, la potente luz de esa criatura lo estaba siguiendo al lado del humanoide que no se rendía para nada en su persecución. Se empezaba a sentir agotado. Agotado debido al miedo, agotado debido a la ira que sentía en su corazón y, por sobre todo, agotado por el dolor al verse traicionado por Evelyn de esa manera. Deteniéndose en medio del trayecto Senshi supo que aquella carrera era inútil ¿A donde pensaba ir si la ciudad que se vislumbraba delante de él era tan diferente y misteriosa como las criaturas que lo rodeaban? ¡Si ni siquiera sabía hablar el idioma de esos seres, por los Sabios sagrados! ¿Qué pensaba lograr con todo eso?

Deteniendo su huida, Senshi decidió hacer lo más inteligente que pudo haber hecho hasta ese punto de su vida: rendirse.

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Se había detenido, de todos modos no pensaba dejarlo huir. Aumentando su potencia de nado, Lewister, pudo llegar a él y dándole un solo puñetazo descubrió, para su sorpresa, que la piel de aquella caricatura era suave como la seda y el tacto con ella era agradable. La nariz de aquel dibujo comenzó a sangrar. Los botes de la policía estaban cerca, sin perder tiempo, Lewister, tomó sus esposas y se esposó con aquella caricatura diciendo

- Estas bajo arresto “Betty Boop”, por agredir a un oficial, robar propiedad de la policía…

- Y asesinato- terminó de contestarle su antiguo compañero y actual jefe, el Teniente Stuart Jackson- al parecer encontramos a nuestro asesino del orbe

4

Lo primero que vieron fue el seno izquierdo colocado en el tronco del árbol como si fuese una rama o una parte más de la planta, el resto fue tan macabro que los mismos paramédicos, con años de experiencia atendiendo catástrofes y viendo situaciones que harían palidecer a una persona común, por poco vomitan al presenciar los restos de la joven Jennifer Stallion de catorce años de edad desaparecida el quince de ese junio del 2017.

Ramírez tuvo que esperar un poco por la ayuda que le habían prometido.

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Se encontraba mojado, esposado e incapaz de comunicarse; pero un muchacho joven, de unos 35 años, lo veía con detenimiento. Tras contemplar, por unos minutos, a la misteriosa caricatura, exclamó:

- ¡Carajo, ya sabía que me resultabas conocido! ¡Eres Eraba Senshi! El protagonista de ese Anime- Senshi lo miró sorprendido al ver que aquella criatura había dicho su nombre, al parecer lo conocía

- ¿Acaso sabes quién es este idiota animado Denjer?- le preguntó Lewister secándose el cuerpo, el bote iba en dirección al muelle y de allí se dirigirían a la estación de policía

- ¡¿Que si lo sé?! ¡Claro que lo sé!- exclamó el joven detective Sam Denjer, compañero de Lewister desde haría diez años- es el protagonista del Anime: Yokai No Me

- En español Sammy, por favor- le pidió Lewister secándose su cuasi calva cabeza

- Si, lo siento- se disculpó Denjer colocando sus manos sobre su rostro intentando calmarse- el programa se llama El Ojo del Yokai y es un show que terminó recientemente tras nueve temporadas al aire

- Este cabrón me es demasiado real para considerarlo un personaje ficticio- le contestó Lewister sentándose frente a su prisionero

- Y es el principal sospechoso en el caso del Asesino Del Orbe- finalizó Stu

- Veo difícil que sea él, teniente. Senshi no fue creado sino hasta el año dos mil siete y el Asesino Del Orbe lleva más de treinta años atacando a sus víctimas- mirando a Senshi, Denjer, añadió- literalmente Senshi tiene una coartada más que solida de donde estuvo estos años durante los asesinatos

- Extrañaré los viejos tiempos en los que el Rating no era considerado un testimonio valido para el juicio- gruñó Lewister molesto- de todos modos, aun si no es el asesino, agredió a un oficial y robo una motocicleta de la policía ¿Qué haremos con él ahora?

- No lo sé; pero lo mejor será dejar que otros se encarguen del asunto. Somos oficiales de policía, no científicos de la N.A.S.A.

- ¿Watashi wa doko ni imasu ka?- les habló Senshi con un tono de confusión

- ¿Qué fue lo que dijo?- preguntó Lewister molesto

- Quiere saber en donde se encuentra- les contestó Denjer

- ¿Acaso sabes hablar Japonés?- le preguntó Stu sorprendido

- Un poco- sonrió Denjer

- Dile que se encuentra en la ciudad de Los Ángeles y que está arrestado por agredir a un oficial de policía, portar un arma blanca sin licencia, robar una motocicleta policial y ser un completo idiota- le contestó Lewister molesto, Denjer asintió y le dijo lo que sucedía. Senshi se vio sorprendido y solo se limitó a preguntar

- ¿Kommetai masu ka?

- Quiere saber si esta en problemas- tradujo Denjer

- Si y en uno de los gordos- le contestó Lewister añadiendo- dile que el Detective Lewister amará patearle el trasero cuando este entre rejas

Senshi recibió la respuesta por parte de Denjer y sonriendo se limitó a decir:

- Yorokobi wa watashi no mono ni narimarasu

- El gusto será mío- tradujo Denjer

El bote llegó al muelle, Lewister junto a Denjer irían a ver la escena del crimen mientras que Senshi sería llevado a la estación hasta saber qué hacer con él, la noche apenas empezaba para aquellos cuatro individuos.