Frente a mí, como si de un bucle se tratara, aparece otra puerta, una puerta café oscuro, una puerta un tanto familiar. Cuando estaba por poner mi mano sobre la perilla, un dolor intenso en el pecho me azotó, el dolor era indescriptible, solo quería que terminara pronto, que parara ya el sufrimiento. Al cabo de unos minutos el dolor cesó y logré ponerme de pie.
No tenía ni idea de que era lo que estaba causando esos dolores, y mucho menos quería saberlo o volver a experimentarlo.
Volviendo a poner mi mano sobre la perilla con dudosidad, empujé y entré a la nueva parte de este recorrido, esta vez, era de día, en una ciudad, más concreto en una calle. La gente me empujaba, me pasaba a llevar mientras ellos estaban yendo a su destino o al menos lo que parecía su destino. yo empecé a caminar en dirección a la que ellos estaban yendo pero, a la que yo caminaba con ellos, cambiaban rumbo en dirección contraria.
Luego de intentar un par de veces de ir junto a ellos, me rendí y comencé a ir contra ellos. era más fácil ir contra ellos que seguirle por alguna razón. Sentía que por fin estaba avanzando hacia donde necesitaba ir hasta que todos pararon y yo era el único moviéndose. mirando extrañado a mi alrededor vi a quien tenía que buscar.
Una pelirroja sentada en una banca bajo un cerezo, ella parecía estar esperando a alguien, llevaba tiempo posiblemente. a lo que me acercaba, ella me miro y me hizo una señal como incitando a que la viera.
JOSE!! por aquí ! (Chica)
Claramente ella sabía mi nombre, ya sabía el siguiente paradero al que tenía que ir, pero al igual que los otros, yo no recordaba nada de ella.
Si te tardas, debes poner más empeño en nuestras citas. (Chica)
Disculpa, ¿me hablas a mi verdad? (Jose)
Claro que te hablo a ti , bobito. (Chica)
Algo en ella se sentía singular, su tono de voz, su mirada. todo era cálido y reconfortante. por como han pasado las cosas hasta ahora, siento una gran pena por haber olvidado a alguien quien me hacía sentir tan bien.
Perdón si llego tarde. (Jose)
Me debes al menos un completo por eso /dijo ella burlonamente. (Chica)
Su complexión era la de una persona normal, como ya dije, pelirroja y con una sonrisa muy amable. sus palabras eran como abrazos para el cuerpo, algo en ella me hacía sentir protegido.
¿Te vas a quedar mirando todo el rato? (Chica)
Ella puso sus manos sobre mis hombros y acerco su cara hacia la mía.
No hace falta que me pidas a gritos con tu mirada un beso, después de todo tu y yo estamos saliendo ¿recuerdas? (Chica)
Mi respiración se agitó y mis latidos se volvieron locos, ella estaba cara a cara conmigo, esperando a que yo la besara. Ella cerró sus ojos, y su cara se coloro en una tonalidad roja. mientras yo igualmente cerraba mis ojos, la vi a ella.
Su nombre era Francisca, fue mi novia en mis primeros años de formación media. Nos conocimos dentro de una expo de música, ella amaba tocar guitarra y cantar, su voz era la más dulce que había escuchado en mi vida. Solíamos vernos cada fin de semana en la tarde, pasar tiempo juntos bajo un árbol de cerezo, aquel cerezo que se parecía mucho al que tengo encima ahora mismo, ella solía traer su guitarra alguna veces y tocaba mientras estábamos juntos, cantaba aquellas canciones que le gustaban mucho, canciones que hablaban del amor y a su vez de la tristeza.
No olvides que soy tu novia ¿de acuerdo? Siempre estaré contigo y espero que este beso te lo haya dejado bien en claro. (Fran)
Ella se preparaba para levantarse mientras me decía lo que tenía planeado para hoy, iríamos a comer a un restaurante de la zona, ella no solía concurrir mucho a esos lugares debido a que vivía un tanto fuera de la zona urbana. Mientras yo me ponía de pie, perdía mi mirada en su brillante y resplandeciente sonrisa. Saben, una sonrisa que cuando la ves, sabes que todo irá bien, que el mundo no llega a importar mientras ella esté cerca.
Que te dije de quedarte mirando. bobito (Fran)
Ella tomó mi brazo y me guió en la misma dirección en la que todas las personas caminaban, era diferente, con ella yo podía ir en la misma dirección que todos. ellos no cambiaban de rumbo, ya no me chocaban, empujaban, no pasaba absolutamente nada.
Yo se que todo eso eran recuerdos que debía tener reprimidos, todo estaba yendo muy bien, fran y yo nos divertiamos, reíamos juntos. Sin pensarlo antes de entrar al restaurante, la abracé repentinamente.
Jose que pasa (Fran)
Solo quiero que este tiempo dure mucho más. (Jose)
Solo quería que nada de eso acabara, que el tiempo se congelara, que ella siguiera para mi, que la protección, amor, felicidad que sentía siguiera con nosotros. Ella se soltó de mi abrazo, se dio la vuelta y me abrazó de vuelta.
No me trates como si nunca más me volvieras a ver jose, se que me amas y creeme que te amo muchísimo igual. Quisiera pasar toda mi vida junto a tu lado, vivir estos momento mil veces mas y crear nuevos que sean aun mas mejores. Pero para eso debes dejar que el tiempo avance y debemos avanzar con él. De todas formas quiero que sepas que yo te amo y nunca dejaré de amarte. (Fran)
Cuando ella terminó de hablar y tomó mi mano para guiarme hacia una mesa, pude ver su cabello alzarse con el viento, ver su cuello, el contorno de su cara. sabía que algo malo pasaría, yo viví momentos felices con ella. pero no quitaba el hecho de que ella estaba aquí, viviendo dentro de mis recuerdos que olvidé. de la nada, lágrimas empezaron a brotar de mis ojos, la primeras lágrimas desde que empecé este viaje. a su vez Francisca se detuvo en medio de la sala, apretó mi mano, el ruido a mi alrededor sezo y pude escucharla llorar.
Sabes Jose, yo…. Lo siento mucho. De verdad, quería que nuestra última vez fuera especial, que fuera como las muchas veces que nos vimos, que vivimos en la realidad, Pero no puedo. (Fran)
Ella volteo a mi, con una cara de tristeza, sus ojos estaban a punto de desbordar en lágrimas, y las que ya tenía, estaban bajando por sus mejillas. Ella me miraba directo a los ojos, su mirada decía que algo malo pasó, me pedía que me quedara a su lado.
Quiero que sepas que nada de lo que me ocurrió fue tu culpa y no debes culparte. (Fran)
¿Qué ocurrió fran? (Jose)
Ella a casi nada de romper en llantos, me dijo:
Recuerdas que mi familia estaba separada, aquel fin de semana habíamos quedado para reunirnos e ir a un restaurante, aquel día llegaste tarde y para cuando llegamos al recinto estaba lleno. decidimos pasar el día juntos, al menos las pocas horas que quedaban antes de que me fuera con mi padre. (Fran)
Mientras fran me hablaba, las imágenes de aquellos momentos junto, de aquel día fueron haciéndose más y más claras, ella ese dia, me espero bajo el árbol, me dijo que tendría que ir con su padre al terminar para pasar su esos días con él, me contaba que su madre y su padre se habían vuelto a pelear por teléfono, Aquel día fue el último día que la vi.
Luego de la hermosa tarde que tú y yo tuvimos, me fui con mi padre y…. (Fran)
Moriste en un accidente de tránsito. (Jose)
Su madre me había contactado mediante una amiga de la Fran, cuando su madre me dijo lo que había sucedido. Mi cuerpo quedó sin alma, mi vida sin un propósito, quería que todo fuera un sueño, que el tiempo volviera a aquel día y que la pudiera abrazar sin que el tiempo avanzara.
Yo…. mori. (Fran)
Tu madre me dijo que había sido por culpa de tu padre, él había bebido antes de buscart- (Jose)
Ella me abrazó repentinamente, rompiéndo ella en lágrimas, diciendo con fuerza que no me culpara, que ni yo ni ella podríamos haber podido hacer algo para impedirlo. Podía sentir como sus manos se cerraban con fuerza mientras ella sujetaba mi ropa con su abrazo.
Viví los mejores momentos de mi vida junto a ti y me hubiera gustado que tú hubieras sido mi compañero de vida. Nunca me arrepentí de haber pasado aquel día tan hermoso contigo, ni de haberte conocido, me ayudaste a seguir con mi vida, a tener con quien poder apoyarme en mis peores momentos. yo…. (Fran)
Yo, no te culpo, ni me culpo fran, ha pasado mucho tiempo desde tu partida y hoy aunque sea un sueño pude sentirme feliz nuevamente a tu lado. (Jose)
Quiero pedirte un último favor, Jose. ¿Quisieras comer conmigo como si en ese día hubiéramos podido hacerlo? (Fran)
En lágrimas, ella y yo nos volvimos a tomar de la mano y a sentarnos en la mesa que estaba al lado de nosotros. Ella andaba con su guitarra y nada más. Mientras ella intentaba secarse las lágrimas, yo sentía un dolor en el pecho, que aun que se asemejaba al anterior, no quería incomodar el momento e intente aguantar lo que sentía.
Cierra los ojos por un momento. (Fran)
Yo cerré los ojos pidiendo que ella, cuando los tuviera que abrir, ella siguiera a mi lado. De repente el aroma cambió, sentía un poco de frío.
Puedes abrirlos ya. (Fran)
Cuando abrí mis ojos, estábamos en nuestro lugar, el lugar del árbol, pero este era distinto de costumbre, estaba en su máximo esplendor, aquellas hojas rosa brotaban de las ramas, cayendo sobre nuestra mesa que ya hacía puesta bajo este.
Quise escoger un lugar un poco más apropiado para nuestra última cita ¿No te molesta verdad? (Fran)
Claro que no Fran. (Jose)
Ella aunque fuera una creación de mi subconsciente, ella se veía tan real, tan viva. No se si este es un sueño lúcido o alguna de esas cosas que te dice el típico compañero de clase sobre su viaje astral. Pero si de algo estoy seguro es que, no quería que terminara.
Bueno, Jose. No tengo más que estos emparedados, espero que me disculpes. (Fran)
Tranquila, está bien esto. (Jose)
Por más que quisiera comer el emparedado no tenía hambre, supongo que algún efecto de los sueños, pero, ella estaba feliz comiendo, con cada mordisco que ella daba una sonrisa se dibujaba en ella, podias sentir la felicidad dentro de cada mordisco que ella daba.
Sabes, he tenido mucho tiempo que he querido decirte lo mucho que fuiste para mi (Fran)
Ella bajó su emparedado y me miró a los ojos, su mirada era penetrante y decisiva.
Aunque yo sea la proyección de aquellos recuerdos que tienes sobre mi, llegaste a conocerme lo suficiente como para saber todo. Yo fui feliz contigo, te amé y te quise más que a nada en el mundo. aquellos momentos bajo nuestro árbol fueron los mejores que tuve en toda mi vida y nunca pude decirte lo mucho que eso significaba para mi, lo que tú significabas. quiero tocarte una última vez, una canción. (Fran)
Mientras ella estaba cantando y tocando su melodía con aquella guitarra, yo me decía. Fran fue alguien muy especial para mi, ella pudo entenderme, me ayudó a salir de mi agujero que era mi vida en aquel entonces, aun que ella y yo solo estuviéramos diez meses juntos, fueron recuerdos a los cuales nunca en mi vida hubiera querido dejar ir. Lamentablemente, ella dejó la vida a muy corta edad, y el mundo se quedó sin una estrella, sin una voz.
¿Recuerdas aquellas tardes donde tu te quedabas dormido a mi lado cuando tocaba para ti? aquellas canciones que yo no podía cantar ni tocar a otros, pero de algún modo sólo podía hacerlo contigo. Se que yo nunca hubiera olvidado aquellos días. (Fran)
Yo estuve deprimido casi un año después de su muerte. me volví a encerrar en mi mundo, jugaba, hablaba poco, comía poco. Tarde o temprano la vida me necesito, me exigió pruebas, me exigió estudios, me exigió seguir adelante, olvidarla.
¿Por que te me quedas mirando bobito? recuerda que yo siempre estare aqui para ti. /Dijo ella apunto de llorar y bajando su guitarra. (Fran)
Se que eres parte de mi, un recuerdo de los más lindos que he tenido en mi vida, fuiste parte de mi formación de la persona que soy, fuiste importante a tu manera, tus canciones, el sonido de tu guitarra y tu tierna voz. Yo te olvidé porque quise avanzar en mi vida, conocí a alguien más, alguien que me escuchó llorar, y alguien que me hizo reír al igual que tu. pero eso no quita que tu fueras menos importante en mi vida. (Jose)
Lo sé, Jose. (Fran)
Y aunque ya fue hace mucho de eso, yo aun sigo y sigo perdiendo recuerdos, recuerdos como éste, recuerdos como tu. (Jose)
Francisca se secó las lágrimas, y ella con una gran sonrisa y alegría me dijo.
Avanzaste con tu vida y es lo que yo hubiera querido que hicieras si pudiera decírtelo. Yo siempre viviré dentro de ti Jose, siempre tendrás partes de nosotros en ti. (Fran)
Detrás de ella, se empezaba a dibujar una puerta azul. Sabía que el momento estaba llegando, al igual que con Carlo, ella se tendría que ir, debía decirle mis últimas palabras, mis últimos sentimientos hacia ella.
Fran, estos son los últimos minutos que tu y yo podremos estar juntos. Ese día, y los días que le siguieron, yo solo podía pensar en ti, en cómo pudo haber sido nuestra vida juntos, en como hubiera parado aquel momento. Tu fuiste especial, tú eras especial. (Jose)
A todos nos llega la hora José, algunos antes que otros. Tu, debes seguir luchando, creyendo en ti, no pierdas nunca la esperanza ni el amor a la vida. mi amado bobito. Gracias por estos últimos momentos, por haber hecho realidad mis últimos minutos contigo, por haberme escuchado tocar por última vez, por hacerme reir y llorar, por hacerme sentir viva una vez más. Gracias mi amado, gracias Jose. (Fran)
Y ella, y todo el ruido que había, desapareció frente a mi. Un pequeño pétalo de aquel árbol caía sobre la mesa, aquel árbol frondoso, ahora estaba seco y su última hoja había caído. El estuche de su guitarra seguía sobre la mesa, y este al abrirlo, tenía pegado por dentro, una foto mía junto a ella, bajo este árbol de cerezo. los dos, riendo.
Comments (0)
See all