Casi no pude dormir dando vueltas, así que me levante temprano y empecé a leer los archivos del reino, sus mapas etcétera.

G — Mi señora, ¿Puedo pasar? –

— Adelante. –

G — Le traje una lista de personas a las que hay que devolverle impuestos y bienes. –

Me puse contenta a ver que ya tenía a alguien de confianza para hacer algo en este reino de corruptos.

Me dio la lista y son justo los nombres de los que cite en el castillo.

— Maravilloso, por fin alguien que sirve en este reino.  –

Me alegre tanto que lo abracé.

— Ya había avisado a estas personas, nunca espere que tu hicieras una lista para devolver lo que la corona le robo a sus ciudadanos, has demostrado ser de confianza. –

G — Le doy gracias a Dios de estar vivo para ver a alguien que sí se preocupa por el pueblo. –

El lloró, era la primera vez que veía a un hombre tan grande y mosculoso llorar.

— Venga no llores hombre. –

G — Es que estoy demasiado contento, por fin habrá justicia en este país. –

— Venga hombre vamos a prepararnos para recibir a esa gente, tardaremos días en esta tarea, quiero que estés allí echando una mano. –

G — Yo encantado. –

Llamé a un guardia para que le entregase la parte que se le debe a George, no le notifique nada a él quería ver si era de confianza o no.

—He de confesar que te probé y en tu lista faltas tu, no sé porqué no pusiste tu nombre en ella, a ti también te robaron, siento no haberte notificado nada quería saber si eras de fiar en serio, lo siento. –

G — No se preocupe, no me importa el dinero mientras mi país esté en paz y sea próspero. –

— Anda hombre toma tu dinero, te lo ganaste. –

No quería tomarlo así que básicamente tuve que obligarlo.

— Hubieron muchas personas que se quedaron en la calle por los impuestos, los ladrones, etcétera, por lo menos podrán recuperar lo que los impuestos les quitaron. –

G — Si, gracias a Dios. –

— Por favor ya deje de llorar. –

G — La felicidad me abruma no puedo dejar de llorar por culpa de ella. –

Me reí y empezó a llegar la gente al salón del trono para recibir sus bienes, se les entregaba sus pertenencias acompañadas de una disculpa, estuvimos así hasta altas horas de la noche, la gente que esperaba decidió volver mañana, algunos se negaron a irse, así que los hice pasar y mandé a acomodar establos y demás para que pudiesen quedarse.

—Menuda locura de día. –

Isa — Por fin terminó. –

Isa se echó a mi lado, ella ayudo muchísimo hoy, estuvo de arriba para abajo, todos están cansados.

— Mañana hay que continuar. –

Isa — Me alegra ser parte de esto aunque no he hecho nada para ayudar. –

— Ya tendrás tu turno, no te preocupes. –

Nos miramos y sin darme cuenta nos estábamos besando, creo que esta falta de calor humano me va a llevar a hacer una estupidez.

— Espera no deberíamos. –

Isa — No puedo gobernar esto yo sola, necesito una pareja, debes ser tú, aún no entiendes bien cómo funcionan los reinos, aprende más y te darás cuenta de qué tengo razón, no aceptaré pareja que no seas tú, buenas noches, su alteza. –

Se marchó dejando un lío en mi cabeza, le dije a la yusha que se adaptara y ahora soy  yo quien debe hacerlo, con eso en la cabeza me quedé dormida.

Me desperté súper tarde ya George y Isa estaban en pie devolviendo los impuestos e bienes.

— Siento despertarme hasta ahora. –

G — Te vimos muy cansada así que te dejamos dormir, lo necesitabas. –

Isa — Podemos encargarnos de esto, tú a estudiar, no hagas hechizos, solo estudia. –

— Me da mucha pereza es más fácil con el hechizo. –

Isa — Solo no te sobrecargues el cerebro de información. –

—Lo haré por días. –

Isa — Nos vemos en un rato. –

Empecé a cargar información en mi cerebro y cada cosa que metía en mi mente, confirmaba lo que Isa dijo anoche.

Volví para ayudar, pero una vez más dijeron que se encargaban y que no me preocupara, así que fui a la ciudad, ya habían levantado los cadáveres y todo estaba limpio, los mercados estaban abiertos, ya la ciudad se estaba recuperando, iba metida en mis pensamientos y unas chicas chocaron conmigo.

Xxxxs — ¡Lo sentimos su majestad! –

— No se preocupen, iba distraída. –

Xxxx — Su majestad quería agradecerle gracias a que devolvieron lo que le robaron a nuestros padres por fin salimos de las calles y pudimos volver a nuestros hogares. –

— Sólo estamos haciendo lo correcto. –

Xxxx2 — También quitaste del poder a esos criminales, todos dicen que te servirán sin importar tu raza. –

Xxxx — Si, eres mejor que un humano, todos tienen fe en que harán lo mejor para la nación. –

— Ustedes son muy inteligentes. –

Xxxx3 —El rey Arthur era un maldito pero obligaba a todos a estudiar obligatoria mente sin importar su clase social. –

— ¿Qué habéis estudiado? –

Xxxx — Yo estudié para trabajar en el gremio de comerciantes, pero estaba cerrado. –

Xxxx1 — Yo para Maestra de conocimiento básico, eso quiere decir las cosas que todos deben saber, cómo la lengua, la cultura, los números etc. –

Xxxx2 — Se me envió a la escuela de alta costura. –

Xxxx3 — Yo estudié para ser cocinera. –

Xxxx4 —  Yo fui a la escuela de magia. –

Xxxx5 — Y yo para herrería, ya sé que no hay mujeres herreras, pero no me interesa. –

Xxxx6 — Y yo magia de curación y pociones. –

— ¿Tenéis trabajos? El castillo está lleno de soldaditos, por ahora todo lo hacen ellos, vayan al castillo mañana, os atenderé, si conocéis jóvenes de confianza que no tengan empleo llevenles con ustedes. –

En mi camino por la ciudad encontré más personas que pueden ser útil para levantar la economía y para servir al pueblo, estoy pensando en que las personas deberán escalar hasta convertirse en nobles aquí, suena un sistema bueno, nadie estará donde no debe, según sus obras y servicio a su pueblo escalaran o se quedarán en el mismo lugar.

Compre ingredientes en la ciudad, mucha cantidad debo decir, en cada puesto querían regalarme lo todo, pero me negué.

— Estoy de vuelta. –

Isa — Bienvenida Hadia-sama. –

G —¡Su alteza, ya hemos terminado por hoy! –

— Buen trabajo chicos. –

Hice aparecer una lista de nombres y sus profesiones.

— He traído más trabajo. –

G — Me extrañaría que no trajeses más. –

Isa — Estoy de acuerdo. –

G — ¿Qué es este nuevo trabajo? –

— Personal para las instituciones y para el castillo. –

Isa — Bien eso podemos hacerlo. –

— Aún no, mis chicos vuelven mañana, también unas chicas que cite aquí, una cocinera, una modista, una herrera y dos magas, una de ella se especializa en magia curativa. –

G — El cabron de Arthur al menos hacia que las personas tuvieran estudios. –

— No sé cuál era el punto si les robaba todo. –

Isa — Supongo que solo él se entiende. –

G — Nunca sabremos que pensaba él en ese tiempo. –

—  Aún tengo que juzgar a los nobles y a su rey según he leído deben pagar con sus vidas, también necesito un ministro de defensa, uno de asuntos exteriores, uno de educación y cultura, uno para la agricultura y recursos, formar una corte va a ser difícil. –

G — Falto el encargado de la economía. –

— Ese serás tu por supuesto, una de las chicas que viene mañana trabajará para ti, para que tengas ayuda. –

G — Eso es demasiado para mi. –

— Creo que eres el mejor para el puesto, confío en qué los libros de cuentas estarán limpios y que la economía estará bien en tus manos. –

G — Espero poder cumplir con mis tareas y sus expectativas. –

—El país depende de ello. –

Luego de cenar nos fuimos a dormir pero yo seguía pensando en lo que dijo Isa.