Los ojos de Jax se agrandan y balancea la caja de metal a su lado y en la dirección del hombre detrás de él. El Sr. Creso suelta el cuello de Jax para bloquear el golpe. Jax deja caer el maletín y sale corriendo por la puerta. Oye gritos cuando un hombre apunta con un cuchillo en su dirección. Corre a través de la puerta, pasa a los hombres fumando y sale a la calle. No pensó que simplemente seguía corriendo. Podía escuchar a la gente en la distancia pero sigue corriendo hasta que ya no puede respirar. Pasa por el Hospital Nova North y corre por un callejón donde ve un gran contenedor de basura. Sin pensarlo se sumerge en él y se calla. Pasa al menos una hora sentado inmóvil por miedo a que alguien lo escuche. Finalmente se da cuenta de que le arde el brazo y lo frota con las yemas de los dedos. Siente algo cálido y húmedo, y al mirar hacia abajo ve sangre. Debe haber sido apuñalado por el hombre del cuchillo. La vista y el olor de la sangre lo enferman. Su estómago se revuelve cuando su nariz comienza a descomponer cada olor en el bote de basura. Comienza a marearse, por lo que toma su teléfono para llamar a Bren.

Le susurra al teléfono diciéndole a Bren que lamentaba haber huido. Le dice que está en problemas y que se esconde en un contenedor de basura cerca del Hospital Nova North. Bren le dice que mantenga la calma y le envía sus coordenadas desde su teléfono.

No pasa mucho tiempo antes de que Bren y Fuchsia saquen a Jax del contenedor de basura. Se había desmayado por el dolor y el estrés. Fuchsia realiza algunas comprobaciones vitales mientras Bren las lleva a su laboratorio.

Fuchsia podía decir que la conducción de Bren se estaba viendo afectada por la preocupación por Jax. Ella le asegura que estaba bien y que lo arreglaría en poco tiempo.

Bren mira a Jax, cuya cabeza descansa sobre el regazo de Fuchsia. Fuchsia acaricia mechones de su cabello mientras lo mira a la cara.

Bren suspira y dice "¿Puedes decirme cómo conoces a Jax?"

Fuchsia mira hacia arriba, sonríe a Bren y luego mira por la ventana.

“Jax era un niño tan lindo. Nos conocimos cuando él tenía ocho años y yo dieciséis.

“Recientemente comencé mi doctorado en Neurociencia con una especialidad en Cibernética Médica y me ofrecieron una pasantía con el Dr. Joseph Collins. Ya había trabajado estrechamente con él durante mi programa de maestría y su investigación se alineó estrechamente con lo que me interesaba. No lo dudé y tomé el puesto de inmediato.

“Mi mamá solía trabajar muchas horas para poder mantenernos desde que mi papá nos dejó cuando yo era pequeña. Crecer fue muy solitario, pero entiendo que ser madre soltera es difícil y ella estaba haciendo todo lo posible.

“Pasé la mayor parte de mi tiempo bajo la atenta mirada de mis colegas y del Dr. Collins en su laboratorio. El Dr. Collins fue mi mentor, pero se convirtió en una figura paterna para mí. También tuvo un hijo, Liam Collins…. Jax.

“Jax perdió a su madre en un accidente automovilístico cuando tenía 4 años. Sus heridas eran tan graves que el hospital en el que se encontraba no pudo hacer nada para salvarla. A menudo hablaba de su esposa y me di cuenta de que la amaba mucho. El Dr. Collins se dedicó hasta el punto de obsesionarse tratando de producir resultados más rápidos en su investigación para salvar vidas. Lamentablemente, a veces creo que su investigación le quitó el tiempo con Jax.

"Jax no tenía amigos y pasaba la mayor parte del tiempo en el laboratorio con su padre cuando no estaba en la escuela. Cuando mi mamá trabajaba hasta tarde o durante la noche, a menudo terminaba en la casa del Dr. Collins. Jax y yo jugábamos videojuegos, lo ayudaba con la escuela y hablábamos mucho. ¡Con los años había comenzado a pensar en él como mi hermano pequeño! De hecho, éramos muy parecidos cuando éramos más jóvenes. Los dos éramos diferentes y nos intimidaban mucho en la escuela. Pude ver a Jax crecer y estuve allí para él cuando su padre estaba ocupado con el trabajo. Cuando comenzó la escuela secundaria, se había unido al equipo de atletismo y había hecho un par de amigos. A menudo iba a sus competencias de atletismo para verlo correr. ¡Nunca lo adivinarías, pero era uno de los mejores de su equipo!

“Nuestro equipo de investigación había desarrollado muchas tecnologías médicas nuevas y prometedoras. Pero con cualquier investigación, se necesita mucho tiempo para que se apruebe para su prueba. El Dr. Collins y muchos de los otros investigadores, incluido yo mismo, queríamos continuar con las pruebas independientemente de la aprobación. Usted y Sina tuvieron la suerte de estar en hospitales que tenían médicos de nuestros equipos de investigación. El Dr. Collins y yo pudimos brindarle su corazón y a Sina sus manos ".

Fuchsia rozó la frente de Jax y dijo: "Jax en realidad tiene el último proyecto en el que el Dr. Collins y yo trabajamos juntos. Fue como si estuviera hecho para él ".

"¿Cómo es que Jax se lesionó tanto?" Pregunta Bren.

Fucsia se frota las lágrimas de la cara al recordar la noche. “¡Fue una noche que trajo caos y muerte!