La conferencia inició cuarenta y cinco minutos después de lo programado. La universidad había acomodado a los estudiantes por año:
En la parte posterior del salón estaban los de último año, le seguían los de cuarto año, en el medio los de tercer año, y por último y en la parte delantera los de segundo y primer año.
El evento inició con la bienvenida por parte del director de la universidad y los organizadores, disculpándose por el atraso en el evento.
Al inicio hubo diferentes charlas estilo mesa redonda entre periodistas, miembros del ministerio público, forenses y hacían participar a los estudiantes en las conversaciones. Después de un refrigerio que tuvieron a mitad de la mañana, continuaron con talleres, enseñándoles a los estudiantes como evitar filtración de información y manejo de prensa.
Y por último una conferencia a cargo de Diego Mendel y el director del Ministerio Público (amigo cercano de Diego), ambos expusieron casos y errores de filtración de información. Como muchas veces la información era dada por el mismo equipo, a través sobornos hechos por medios de comunicación.
Antes de terminar la presentación Mendel se giró a al director del MP
- Tú ya me conoces y me gustaría hacer algo antes de acabar esta presentación – Dijo con una amplia sonrisa – Es algo que hago mucho en la carrera de comunicación, pero quiero intentarlo también con estos jóvenes
- Adelante, siempre consigues los mejores efectivos en estas dinámicas – dijo devolviendo la sonrisa
- Para aquellos que no estén enterados… a mí me encanta platicar con los mejores estudiantes de los diferentes semestres de periodismo – dijo Diego haciendo una pausa – pero he escuchado del director de la carrera de criminología y algunos licenciados que hay muy buenos estudiantes que están dispuestos a seguir aprendiendo. Me gustaría al final que se quedaran un momento más para poder acercarme con ustedes y conocerlos mejor. A quienes elija, hoy a las 14:00 horas tendremos un pequeño refrigerio donde podremos hablar más y tener la oportunidad de crear conexiones profesionales
- Bueno ya lo escucharon, quienes estén interesados, se pueden quedar a platicar con el Licenciado Mendel
Laura sonrió ligeramente y aunque no lo dijera, era algo que deseaba desde hace algún tiempo atrás, poder acercarse a Diego, pero esta vez tenía un pretexto para hacerlo o permitir que él se acercara a ella.
La actividad acabó, algunos estudiantes se quedaron y otros se fueron. Laura aún estaba guardando algunas cosas cuando Karla se acercó a ella y le comentó que Andrés ya se quería ir, quería buscar un lugar para comer y un lugar donde quedarse a pasar el rato porque aún era la 01:00 p.m. Antes que alguien más pudiese hablar Laura sintió una mano firme en la parte superior de la espalda, ella dio un pequeño brinco, girando se encontró con los ojos de Diego
- ¿Te asusté? Perdón, no fue mi intención – Quito la mano de su espalda y los chicos abrieron espacio, Diego extendiendo la mano dijo – Mucho gusto, soy el licenciado Diego Mendel
- Yo soy Andrés, un gusto – extendiendo también la mano
- Y estas lindas jovencitas – Preguntó Mendel con cierto descaro
- Yo soy Karla – respondió un poco incómoda
- Yo soy Laura – dijo con una amplia sonrisa
- Mucho gusto, chicas ¿Piensan quedarse?
- No, ya nos íbamos – Respondieron Karla y Andrés
- Quédense al almuerzo, he escuchado muy buenas cosas de ustedes tres
- Tenemos planes – respondió Andrés
- Insisto, quédense. No durará mucho el almuerzo y si desean se pueden retirar a las 03:00 p.m. o un poco antes – girando hacia Laura dijo - ¿A usted le molestaría quedarse?
- La verdad no, pero si mis amigos desean irse, me voy con ellos – respondió un poco apenada
- Déjenos discutirlo un poco ¿Le parece bien? – Dijo Karla
- Está bien, los espero en la entrada y me comentan
Laura en realidad estaba avergonzada, no quería forzar a sus amigos a quedarse – Y si van a busca un lugar, yo me quedo y luego los busco – les dijo a sus amigos después de que se retirara Mendel; Karla y Andrés la vieron con cierta desaprobación – Teníamos otra idea de pasar el rato, pero no te dejaremos sola – dijo Karla codeando a Andrés – Si, Karla tiene razón, no te dejaremos sola. Tal vez no es lo que esperábamos, pero si necesitamos pasar el rato de alguna forma – Laura mostró entusiasmo y los tres tomando sus cosas para salir. Como dijo Diego, él los esperaba en la entrada – Entonces ¿Qué decidieron? – pregunto él, los chicos le comentaron que irían y Diego les dio la dirección en donde sería el almuerzo.
La actividad terminó a las 01:00 p.m. y salieron del auditorio a las 01:15 p.m. lo que les daba aún 45 minutos. Se fueron a la casa de Karla que vivía cerca de la universidad a dejar sus cosas y comer algún refrigerio.
Karla vivía sola, ella era del departamento de San Marcos, para ser más precisos del municipio de Malacatán. Sus papás le permitieron mudarse por tener familia por parte de su mamá en Xela.
Era la primera vez que iban a su casa – Que dichosa, yo todavía tengo que estar con mis papás – dijo Andrés – No creas que es tan fácil, tengo que mantener mi promedio o me regresan a San Marcos – le respondió.
Laura no decía nada, pero estaba nerviosa, había algo en Diego que le atraía y que necesitaba averiguar que era. No deseaba que sus amigos se dieran cuenta de su impaciencia porque llegara la hora, así que se sentó en la sala a esperar mirando su teléfono, Karla llegó con unos vasos de jugo de naranja y unos sandwiches de jamón con lechuga y tomate. Mientras los tres miraban sus teléfonos y compartían memes, Andrés pidió saber donde estaba el baño de visitas – Está pegado a las gradas – dijo señalando – Mientras entra al baño iré a lavarme los dientes – dijo ella dejando sola a Laura.
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