—¡genial, regrésate! —pasaron unas horas desde que te marchaste. 

Se sintió extraño estar sin ti, todavía no sé qué eres, ¿debería ir al doctor o confiar en mi instinto de pensar que eres una persona? 

Ahora mismo estoy haciendo mi tarea, ¿tú sabes que mierda significa "inefable"? 

Te lo diré, es algo tan increíble que no puede ser explicado con palabras; creo que me siento así contigo; más bien tu eres inefable, es muy extraño que me mires, pero de alguna manera me siento acompañado; gracias por estar aquí. 

Deberíamos conocernos más, ¿no crees?, pero estoy seguro de que te decepcionaras cuando me conozcas más.

La puerta de la casa se abre, no me molesto en saludar a mama; el zapateo de sus tacones se escucha por toda la casa y seguramente ahora está en el refrigerador sacando una cerveza —como siempre. 

Termino de hacer la tarea, aunque en realidad solo he contestado dos preguntas y he hecho dibujos sin sentido en el resto de la hoja, guardo todo en mi mochila; me pongo mis tenis blancos que en realidad son más grises por lo sucio y cambio mi playera por una azul con un logo pequeño que dice dairy queen; salgo de mi oscura habitación, doy unos cuantos pasos para entrar a la habitación de mama.

Al abrir la puerta un aroma a cerveza con perfume invade mis pulmones, la televisión vieja esta encendida, las paredes son blancas y sin ningún adorno a excepción de un espejo y un cuadro donde se encuentra mi hermano, mi padre (si es que así le puedes llamar al hombre que te abandono) mi madre y yo; mama esta acostada en su cama con un vestido entubado mal acomodado y su cabello rubio hecho un desastre. 

—creo que olvidaste hacer las compras ayer; hare las compras yo, pero no tengo dinero así que tomare un poco de tu bolsa —su mirada está perdida en el televisor y pareciera que no le he dicho ni una sola palabra —gracias, me encanta hablar solo —Tomo las llaves del auto y salgo de casa sin esperar alguna respuesta de su parte. 

Tomo el dinero y salgo de su habitación para ya no verla más; mama nunca fue ese tipo de mujer autosuficiente, ella cree que para ser feliz necesitas una pareja. Le rompieron el corazón demasiado joven, mi padre la engaño con otra, consiguió un muy buen empleo y se marchó cuando yo apenas era un niño; por desgracia mama es alcohólica y sobrevivimos con el dinero que gano trabajando y con el poco dinero que nos manda cada mes mi hermano Dean. Todo esto es una completa mierda, ¿verdad? 

Todos en la escuela creen que soy drogadicto, o que soy un chico solitario por querer ser diferente, pero no es así, la maldita realidad es que soy un chico con problemas en casa —Me gustaría ir a donde estas tú, tal vez es mejor que aquí. 

Por fin llego al supermercado, solo compro una caja de huevos, jamón, cereal, leche y una pequeña botella de agua.

Justo cuando voy a caminar a la salida veo un rostro conocido —tiene que ser una broma —una chica nueva entro al instituto y para mi grandiosa suerte (claramente es sarcasmo cariño) va en mi salon y me han pedido que le enseñe la escuela, pero evite todo eso porque no me gusta hablar con personas nuevas.

Paso a un lado de ella intentando pasar desapercibido, pero ella me detiene tocando mi hombro. 

—¡hola! vamos en la misma escuela, ¿verdad? —su voz es chillona; ella es morena, piernas largas, es algo robusta, su rostro es muy lindo; esta chica es muy guapa sinceramente. 

—hola, amm si —una parte de mi quiere quedarse y tratar de hacer una nueva amiga, pero una mucho más grande quiere huir; odio encontrarme a personas del instituto. 

—me llamo Alex, espero verte luego Conrad. 

No tardo en despedirme y me marcho antes de que pueda pasar más vergüenza con esta chica —sí, todo me da vergüenza. 

¿Cómo es que ella sabía mi nombre?