Luego de unos días, nosotros nos vimos con la obligación de seguir planeando estrategias para el gran ataque que le daríamos a el rey Ragnar.

Por un tiempo, me aleje de Esberg, y de mis hermanos, pues como lo recalcó, este no había Sido un buen año, pues perdimos más de lo que pudimos conseguir.

Entiendo, que esto forma parte de la vida, pero no creí que esto sería tan grave, y más que yo fuera el que tendría que lidiar con esto, junto con mis hermanos.

Yo me había ido de Esberg, yéndome a una cabaña, a unos cuantos kilómetros del reino.

Pronto, note que hacía más frío de lo común.

Esto quería decir, que el Yule estaba cerca.

(El Yule, era una celebración pagana o Nórdica, una época dónde se acababa el año, y se festejaba al dios Frey, se le agradecía lo que había pasado en el año, Frey era el dios de la fertilidad, a él se le agradecía las grandes cosechas del año, se asesinaban animales, y se los ofrecían como ofrenda a los dioses, en las casas de los nórdicos, se ponían árboles, haciéndole homenaje al Árbol Yggdrasil, el árbol de la vida.

La costumbre y o tradición, era que se debía tener un leño del año pasado, a este se le amarraban unas ramas con un listón rojo, y se le prendía fuego, al hacer esto, la tradición era que cuando se quemaba el leño, se decía “Como se consume el leño viejo, se consume el año viejo”, está festividad años más tarde, fue copiada por el Cristianismo, y ahora siendo conocida como Navidad o Natividad, el Yule, se celebra del 22 de diciembre al 2 de Enero)

Al pasar del tiempo, no podía creer lo que había pasado en todo el año.

Yo, me puse a pensar sobre todo lo que se tenía que hacer, la guerra iniciaría pronto, y aún que ya había peleado cientos de veces, en esta ocasión tenía miedo.

Sabía que si perdíamos, las vidas de cientos de guerreros de Esberg estarían en peligro.

Me encontraba muy pensativo en todo.

Cuando de pronto, llamaron a la puerta.

Lars- Aren, por favor sal hermano, tiene días que no estás en Esberg, la gente ya comenzó a dudar del plan que tenemos.

Por favor sal.

Egil- Hermano, se que estás mal, pero por favor, te necesitamos, debemos pelear.

Aren- Hola hermanos, lamento haberme ido así.

Honestamente necesitaba un respiro, con todo esto, ya no sé en qué creer, vámonos, tenemos que alertar a los hombres.

Vamos a hacer venganza a nuestra madre.

¿Dónde está Hans?

Egil- Bueno, al no estar tu Aren, lo dejamos libre en el reino, lo golpeó casi todo el pueblo por traidor, de no ser por nosotros, estaríamos en otro funeral.

Creímos que ya era tiempo de que se uniera al ejército, para pelear contra Ragnar.

Aren- No estoy muy de acuerdo con ello, pero está bien, tienes razón, que se una al ejército.

Hermanos, ya está llegando el Yule, y el invierno también.

No podemos partir a Suecia ahora, no llegaríamos vivos.

Lars- Ah, tienes razón, bueno, tendremos tiempo para prepararnos mejor, yo me iré a entrenar, debemos estar listos pronto.

Todo tenía que estar listo para el gran ataque que iniciaríamos a Suecia, mi hermano Daven ya se le había notificado está situación, se decía, que incluso ya tenía un ejército de 900 guerreros listos para pelear.

Por nuestra parte, serían unos 600 guerreros más, esto quería decir que tendríamos un ejército grande.

El Yule estaba comenzando, se veían los hogares de toda la gente decorados, una festividad, que honestamente yo amaba, pero ahora con la ausencia de Iker y mi madre, ya no sé sentía igual.

Mientras caminaba por el reino, veía a los niños jugar, emocionados por el Yule, yo extrañaba mucho esa felicidad.

Pero el crecer, siempre será parte de la vida.

Al día siguiente El Yule había iniciado, la gente del pueblo, celebraba, comía y bebía, todos estaban felices.

Mis hermanos también lo estaban.

Mi padre se acercó a mí.

Hans-¿ Que pasa hijo?, ¿Por qué no estás celebrando con tus hermanos?, es una linda festividad, se que te sientes mal, pero, vamos hijo, tranquilo, ya verás que vamos a ganar.

Aren- No hay nada que celebrar, este año hemos perdido más de lo que hemos ganado, y eso no me agrada, primero Iker se fue, y ahora mi madre, ¿Qué quieres que festeje?

Por primera vez, estoy enojado con los dioses, me han arrebatado tanto.

Hans- Así es la vida hijo, yo también extraño a tu madre, y a tu hermano.

Aren- Ay basta, que si no fuera por ti, nada de esto hubiera pasado.

Hans-Lo se hijo, al respecto, quiero hablar contigo sobre ello, realmente te mentí, no mate a Iker por qué solo me lo ordenaron, ciertamente tenía cierta envidia, y odio, no podía creer que Iker había logrado lo que yo intenté por años.

Se lo que dirás, y sé que me equivoqué, pero esa es la realidad.

Aren- Valla, que novedad, dime algo que no sepa, era obvio.

Y te diré una cosa, en cuanto termine esto, te juro que voy a vengar a Iker, eso te lo puedo asegurar.

Luego de unas semanas de celebración, el año había terminado, la primavera había llegado, y era hora de zarpar y atacar Suecia.

Los barcos estaban listos, todo parecía marchar de acuerdo al plan.

Lars- Hermanos, todo está listo les deseo suerte, nos volveremos a ver, ganaremos esta batalla, Daven partió rumbo a Suecia.

Calculo que vamos a llegar igual que el.

Recuerden que vamos a vengar a nuestra madre, tienen que ser fuertes, los amo mis hermanos.

Aren- Los amo hermanos, nos volveremos a ver.

Egil- ¡Vamos a pelear, y vamos a ganar.!