Ahora que saben que puedo decirle todo a Hen he recibido disculpas,pero en general me han evitado y dejado ir a donde desee. Incluso el trato cuando me acerqué a los establos diferente. ya no me llaman “bestia” sino”su divinidad”, extienden mantas bordadas donde pienso reclinarme en vez de la simple paja. Y ya no ponen una cubeta con zanahorias en una esquina, sino que varias mucamas me traen bandejas con frutas y verduras finamente decoradas, extraño e increíble al mismo tiempo.
Pero más increíble es que me dirija nuevamente al calabozo donde pasé todos esos horribles momentos…
Los ojos fríos me miraban desde la pared donde yo estuve atado de la misma forma, en cambio las ataduras no eran tan estrechas y tenía comida y bebida. Me sentí aliviado y sonreí.
-¿Vienes a burlarte de mi,bestia inmunda?- dijo el alto joven con odio en la mirada.
-No…- mi voz casi no salía ante el miedo que le tengo a esos ojos,sin embargo no vine a enfrentarlo - yo quiero… saldrás pronto…
Escupió tan lejos como pudo para tratar de acestarme - No necesito tu compasión bestia embustera , cuando salga me desharé de tí..te mataré…TE MATARÉ
-Y si lo haces morirás- la voz de Hendrick resonó detrás de mí.Me sentía culpable por estar aquí y porque estoy creando conflictos entre Hendrick y su hijo…
Hen…-
¡Bestia descarada! ¡¿Así es como tratas al Rey de esta nación?!- rugió el muchacho.
Vete Trix…- volteé a ver al muchacho…que me mostraba el dedo medio extendido.- Te veré en mi recámara. Asentí y salí… prometiéndome que trataría de arreglar la cosas entre ellos.
El príncipe encadenado sopló su cabello tratando de retirarlo de sus ojos- ¿Qué te trae aquí padre? - la mucama de siempre surgió de entre las sombras y lo peinó.
-No vine a verte- Hendrick se giró y se alejaba dándole la espalda al reo.
-Sólo sigo tu charada, pero sabes que puedo salir de aquí cuando quiera-gritó el joven desde las sombras.- y terminar con ese entretenimiento tuyo…
El rey habló sin voltear a verle. ¿Y mostrarás a todos que eres un hechicero? ¿Te arriesgarías a nunca ser coronado?- no hubo respuesta a sus espaldas- No lo creo…
- Aún eres mi único hijo, mi reino es tuyo. Pero yo decidiré cuánto vivo, no tú. Saldrás en un mes, y seguirás las reglas. - Dijo Hendrick sin mirarlo
¡Un mes!- gritó- ¡me las pagarás!
Sé que no me harás nada,así que si piensas descargar tu venganza sobre él, te aseguro que no me importará deponer la corona o quedarme sin heredero.
el joven empezó a gritar como una bestia, una bestia enjaulada para no atacar a la mano que le da de comer.
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