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¡Señoras y señores, niños y niñas, traemos de vuelta nuestra sección de efemérides con la portada del calendario de este año, que representa el nacimiento del circo moderno! ¿Recordáis “El Gran Showman”? (Chris lo da todo con esta película). Pues bien, por ahí va la historia de hoy.
Tal día como el 4 de abril pero durante el 1768 en Londres, Philip Astley, reconocido como el padre del circo moderno, y su esposa Patty Astley, presentaban por primera vez sus espectaculares hazañas a caballo, siendo Lunes de Pascua.
A pesar de que el concepto de circo que conocemos hoy en día tiene un origen relativamente reciente, la palabra “circo”, proveniente del latín “círculo” refiriéndose a los anfiteatros romanos, ya existía asociada con otro tipo de actos. Entrenar animales para el entretenimiento, las acrobacias, equilibrismos y malabarismos, son probablemente tan antiguos como la humanidad misma. Los griegos ya practicaban un baile con cuerda; las primeras civilizaciones africanas ya realizaban el siricasi (una combinación de bailes folclóricos y acrobacias); y en la antigua China ya presentaban malabares y acrobacias ante los miembros de la corte imperial. Los payasos (o bufones) también han existido prácticamente en cualquier período o cultura, o sus equivalentes, de ambas maneras como parte de comedias o de forma individual.
Por otro lado, organizar dichos actos como una forma de entretenimiento distintiva, es una idea relativamente moderna. Antes de eso, individuos y pequeñas comparsas recorrían Europa, África y Asia, presentándose en salones de nobles, fiestas locales y mercados. El circo moderno nació en Inglaterra cuando Philip Astley, anteriormente sargento primero ahora jinete acrobático, descubrió que galopando en círculo de pie a lomos de su caballo, las fuerzas centrífuga y centrípeta le ayudaban a mantenerse en equilibrio. Experimentó entonces con el ring para determinar cuál era la distancia óptima para mantener la seguridad del jinete y de la audiencia, adoptando eventualmente el diámetro de 13 metros que aun se mantiene en los circos actuales. El show de Astley consistió únicamente en trucos a caballo hasta 1770, cuando contrató a un payaso, músicos y otros artistas para proveer a sus espectadores de un entretenimiento más diverso. Gracias a esas innovaciones, recibe el crédito de haber desarrollado el circo moderno.
Fue en 1770 cuando estableció el primero de sus anfiteatros. Seguido de su éxito, Astley viajó por Europa para tener particular éxito en París, actuando para Luis XV en Versalles. Muchos imitadores irían después de él, que terminarían de darle forma circo tal y como lo conocemos hoy en día: el italiano Antonio Franconi showman y especialista; en Francia, un jinete rival y anterior empleado de Astley llamado Charles Hughes, que lo introdujo en Rusia; o el americano P. T. Barnum, el hombre que le dio el apodo de “El más grande espectáculo en la Tierra”, además de dar lugar a los característicos y enormes circos itinerantes. Y es en uno de esos circos del siglo XIX en Estados Unidos, de esos que nos suenan a todos, donde nos encontramos en este Universo de Guzbourine, uno de los más sombríos que tenemos, con nuestros chicos siendo contorsionista (Lu Han) y lanzador de cuchillos (Randy), quienes habiendo escapado de su compañía natal tras ser atrapados manteniendo una relación homosexual, llegan a la fascinante ciudad de Nueva Orleans, totalmente ajenos a los misterios y peligros que les aguardarán al unirse a su nueva troupe… Ya les conoceréis del Mardi Gras: https://tapas.io/episode/2779566
¿Qué pensáis de esta historia, marineros? Nos encanta el contraste entre el colorido y la alegría, y cómo el ambiente de circo invita a desarrollar historias de terror. ¿Os gustaría verles la próxima vez en una ilustración más oscura?
¡Tened un buen fin de semana! 💓
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