—Eh, ¿Me podrían responder la pregunta que les hice? – Pregunta con algo de timidez Tobías. Se sentía incomodo con la presencia de los recién llegados.
—Oh, cierto. Yo te responderé– Dice el rubio acomodando un mechón de su cabello– Es porque estás tu.
—¿Yo? ¿Qué tengo que ver yo en esto? – Vuelve a preguntar aún más confundido Tobías.
—Fácil, mira es por– empieza a hablar Christopher, pero es interrumpido.
—Es porque solo los grupos con tres o seis personas pueden entrar aquí para entrenar, y a nosotros nos faltaba un integrante en nuestro grupo desde hace mucho tiempo– Lilith responde antes que el rubio mientras sostiene la mano de Yasmine.
—Pero nunca podíamos llevarnos bien con otras personas al punto de integrarlo a nuestro grupo tanto como amigo y compañero de equipo– Le sigue Alex– Somos malos relacionándonos con las personas.
—Es cierto, solo Lilith es tan social como para llevarse bien con cualquiera– Continúa hablando Rubén mientras mira a Lilith.
—Cuando te conocimos sabíamos que eras el indicado para pertenecer a nuestro grupo– Sigue hablando Yasmine– Bueno, en realidad no, pero de todas formas…bueno– Deja de hablar y apunta a Daian mientras ella solo ríe.
—A pesar de que no te conozcamos mucho, sentimos ese algo especial que nos gustó a los cinco, no nos llevó ni un día llevarnos bien contigo– Termina de decir Daian mientras le mira con una pequeña sonrisa.
—¿En serio? – Vuelve a preguntar este con felicidad en su rostro y ellos asienten– Wow, no sé qué decir, pero– Se da cuenta que no están en el mismo lugar que antes–¿Qué es este lugar? – Pregunta confundido mirando alrededor con asombro.
—Ups– Lilith y Yasmine dicen al unísono mirándose con una sonrisa.
—Poder espacio-tiempo, así es como se llama– Responde sencillamente Rubén a lado de las dos chicas.
—¿Ves esto? – Daian señala el lugar– Primero, bienvenido, ya que, solo nosotros podemos estar aquí, y segundo, este espacio fue creado por Lilith y Yasmine.
—¿Cómo es posible eso? – Pregunta Tobías mirando todo el lugar con brillo en los ojos.
Se veía casi igual al lugar donde se encontraban hace unos momentos, pero con la diferencia de que se veía todo oscuro y brilloso, como si algunas estrellas brillaran alrededor de ellos.
—Ah– Suspira pesadamente Yasmine– Chicos, saben que me gustan las explicaciones y que tengas tanta curiosidad acerca de esto Tobías, pero no podemos mantener esta conexión durante tanto tiempo– Mira el techo y hacia los lados.
—Yasmine tiene razón, tenemos que regresar– Dice Lilith con algunas gotas de sudor en su frente– Solo te podemos decir que lo creamos accidentalmente cuando éramos pequeñas y practicamos nuestros poderes, tomamos nuestras manos y, ¡Puf! – Habla rápido mientras agita su mano restante– Creamos un lugar para nosotros, ya sabes, para hablar de algo importante, como esto– Termina de hablar y da una gran bocanada de aire.
—Oh, de acuerdo. Por ahora me sirve esa información, gracias– Dice agradecido Tobías– Sobre todo por considerarme especial para ustedes– Sonríe muy feliz sacando sus orejas inconscientemente.
—Te sugiero que escondas tus orejas y cola, Tob– Dice Rubén apuntando esas partes de su cuerpo. Tobías asiente y vuelve a la normalidad.
Se miran entre ellos y sonríen. Yasmine y Lilith sueltan sus manos volviendo a la realidad.
—Necesitaban a otro integrante en su grupo– Sigue hablando Christopher.
—'¿Eh? ¿No sabe que nos fuimos a otra dimensión? Eso es increíble'– Piensa Tobías. Divertido.
—¡Oye, rubio! Él ya sabe eso, eres demasiado lento y aburres– Dice Rubén mientras bosteza y el rubio lo mira molesto.
—No quiero molestarles, pero nosotros llegamos aquí antes, ¿podrían irse? por favor– pregunta Lilith amablemente.
—bien, pero no tarden tanto porque a esta hora tendríamos que estar entrenando nosotros– Continúa hablando arrogante el rubio molestando a todos.
—¡Oye, idiota no hables por los demás! – Dice el chico azabache que se mantenía callado desde hace un rato como sus demás compañeros.
Vestía una chaqueta negra con rayas rojas, un pantalón negro y unas zapatillas negras mientras tenía sus manos en los bolsillos.
Todos se quedan observando sorprendidos al chico azabache.
—Estamos cansados y no necesitamos entrenar. En este momento solo queremos descansar y ya, no puedes obligarnos a entrenar solo porque eres un imbécil egoísta que no quiere que ellos entrenen y usen la sala por primera vez– Mira serio y desafiante al rubio sin sacar sus manos de sus bolsillos.
Este lo mira enojado parándose enfrente de él desafiándolo, pero se voltea alejándose del chico más bajo mientras chasqueando la lengua con molestia.
—Bien, pero la próxima semana vendremos aquí, ¡Y no hay excusas, recuerden que yo soy el líder de este grupo! – Habla demandante mientras mira a sus demás compañeros, ellos le miran sin emociones como si ya estuvieran acostumbrados a su comportamiento, el solo ignora ese detalle y luego se va del lugar sin decir nada más mientras dos de ellos le siguen.
—Nos vemos chicos, recuerda que luego hablamos Rubén– Se despide Allison siguiendo el camino de su líder.
—Adiós chicos– Dice otra chica azabache despidiéndose de ellos agitando su mano–Por cierto, nos gusta tu nueva cicatriz gatita, se te ve bien– Mira a Daian con una sonrisa mientras ella le mira extrañada.
—¿Eh? ¿Cómo que "Nos”? – Levanta una ceja confundida mientras toca su mejilla donde estaba dicha cicatriz.
—Adiós– Dice en voz baja el chico azabache viendo por última vez a todos mientras se lleva a la chica arrastrándola mientras ella se ríe bajo– Y tu cállate, no hables de más Lila– Le susurra.
—De acuerdo hermanito, no te enojes– Se ríe mientras sigue al chico.
Lilith y los demás les observan irse sin decir ni una palabra.
—Oigan chicos, ¿En serio se ve bien este rasguño en mí mejilla? – Pregunta Daian de la nada.
—¿Por qué preguntas eso? – Dice Tobías.
—S-solo preguntaba– Habla nervioso– Me caí de un árbol mientras saltaba por ahí– Actúa la escena como si le estuviera sucediendo– Me preocupaba que se viera mal...solo eso, no importa solo hagan como que no dije nada– Ríe nervioso mientras toma aire.
—No digas nada más– Le dice Alex moviendo su cabeza negando y está le hace caso.
—Bueno, cambiando de tema– Dice Lilith– ¿Que dicen si nos ponemos a entrenar ya? Recuerden que tenemos una semana, nunca se sabe cuándo nos pueden dar una tarea como a ellos– Dice refiriéndose a los chicos de hace un momento, los demás asienten y se ponen a entrenar.
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