—Papa, ¿A dónde vamos a ir ahora? – Decía alegre un pequeño niño mientras sostenía un helado, con la mano libre sostenía la mano de su padre– ¿Pa? –Volvía a nombrar a su padre, pero este no le prestó atención y le soltó la mano.
El viento soplaba fuertemente y de los árboles caían varias hojas, las personas iban desapareciendo del lugar poco a poco.
—¿Ocurre algo papá? – El niño algo alarmado trata de agarrar la mano de su padre de nuevo, pero este solo se aleja más y empieza a caminar alejándose de su hijo– ¡P-papa no te vayas, no me dejes solo! – Gritaba el niño mientras corría hacia el tratando de alcanzarlo, de lejos aún podía ver a su padre y a lado de él una mujer sosteniendo su mano y sonriendo con diversión– ¿Por qué lo alejas de mí? Papa no ha estado conmigo desde hace días, ¿Porque te llevas a papá? – Susurraba triste el niño cayendo al piso.
Al..
Ale..
Alex...
—¡Ah! – Gritaba exaltado Alex volviendo a la realidad– ¿Qué diab…? Yasmine– Le miraba molesto. Traía puesto una camisa azul con rayas negras, un pantalón jean negro y unas zapatillas negras.
—¿Qué? Estabas distraído, y no había mejor manera de hacerte volver a la realidad– Sonreía con burla mientras tenía una mano sobre la cadera. Tenía puesto una camisa amarilla, un pantalón blanco y zapatillas blancas.
—¿Era necesario tirarme chocolate líquido? – La miraba con reproche para luego pasar su vista a su camisa que había sido arruinada por el chocolate líquido– Mí camisa...
Daian y Rubén que se habían acercado junto a los demás, olían el olor a chocolate en Alex y miraron su rostro cubierto por un poco de este. Así que, sin pensarlo dos veces, empezaron a lamer sus mejillas y parte del rostro.
—Dai, Rub...– Llama a sus amigos, pero estos no le prestan atención– ¿Podrían dejar de lamer mí rostro? – Pide amablemente mientras trataba de alejar a sus amigos.
Estos dos se miraron mutuamente y negaron con una sonrisa mientras seguían en lo que estaban.
—¿Que sucede? – Dice Tobías acercándose sin entender lo que sucedía– ¿Por qué tienes chocolate encima? – Trataba de no reír mientras lo señalaba. Tenía puesto una remera blanca, un pantalón jean negro y unas zapatillas negras.
—Pregúntale a Yasmine– Alex fulminaba con la mirada a Yasmine mientras está lo ignoraba.
—No molesten a Alex~– Decía con diversión Lilith mientras buscaba algo en sus bolsillos– Aquí tienen unos chocolates– Les sonríe a sus amigos mientras les muestra los dulces, estos la miran y se acercan a ella tomando los dulces. Ella tenía puesto una remera blanca, unos shorts rojos y unas zapatillas blancas.
—Gracias – Dicen al unísono felices mientras comienzan a comer los chocolates.
—Que bien que ustedes dejaron de lamer mí rostro y tengan sus chocolates ...– Dicen con una sonrisa fingida– Pero andaría necesitando que alguien me quite esto, si es posible– Mira a Lilith y luego a Yasmine.
—Bien, ya no seas chillón– Decía Yasmine mientras movía sus dedos y los apuntaba hacia Alex haciendo que de este desapareciera todo el chocolate que tenía encima– ¿No me vas a agradecer? – Sonreía con diversión mientras Alex bufaba y seguía con lo suyo– ¿Al menos nos vas a decir porque estabas tan distraído? – Deja de sonreír y mira a Alex con una ceja alzada.
– No es nada importante– Niega y desvía su mirada– Solo me distraje pensando en comida, estamos desde la mañana aquí y aún no comimos ni unos caramelos– Decía Alex mientras seguía levantando pesas y tirándolas hacia arriba para luego atraparlas antes de que caigan.
—¿Seguro? – Pregunta de nuevo Yasmine insistiendo, Alex solo asiente tranquilo y ella no vuelve a insistir.
—Hablando de eso– Decía Daian– Tengo hambre– Se quejaba mientras frotaba su estómago– Voy a buscar algo al kiosco de aquí cerca. Tenía puesto una camisa negra con rayas blancas, un pantalón parecido al de los soldados y zapatillas negras.
—¿Por qué no vas al mercado? – Pregunta Tobías– Digo, hay encontrarás más cosas para comprar y eso.
—Solo quiero comprar un par de frituras, ya sabes, papas, una hamburguesa o lo que sea– Habla despreocupada mientras se acercaba a la salida– Les traigo algo si me acuerdo– Se despide con una mano mientras sale.
—Oigan, ¿Están libres hoy? – Habla Yasmine a los chicos y Lilith– Estaba pensando que sería buena idea si salíamos hoy para que conocieran a mí primo, considerando que estuvimos ocupados toda la semana con los estudios y entrenando aquí.
—Mm, ya sabes, me gustaría Yaz– Habla Rubén con una sonrisa– Pero a mí papá y a mí nos invitaron a ir a la casa de un amigo de él, dijo que era alguien muy importante para él y no le quiero fallar– Sonreía con algo de tristeza. Tenía puesto una remera negra, un pantalón deportivo azul y zapatillas blancas.
—A mí me encantaría...– Dice Alex suspirando pesadamente.
—¿Pero? – Pregunta Yasmine esperando una respuesta negativa y Alex suspira algo molesto.
—Mi papá me obligó a pasar tiempo con su novia y no me puedo negar porque dice que me quitará mis juegos y no me dejará venir aquí en mis ratos libres después de la escuela– Gruñía con cada palabra mientras tenía los brazos cruzados y el ceño fruncido.
—Está bien, lo entiendo chicos– Suspiraba con algo de tristeza para luego mirar a Tobías y luego a Lilith.
—Yo no tengo nada que hacer, estoy libre– Decía Lilith sonriendo.
—Yo igual, no tengo nada que hacer– Habla Tobías.
—Mm no creo que sea muy divertido que solo lo conozcan ustedes dos...– Hace un puchero– Oh, esperen aún falta Daian, si ella va por lo menos serás tres de cinco, y los demás podrán conocerlo la próxima vez– Decía algo emocionada y los demás asienten con lo dicho.
—Entonces tendrás que esperar a que vuelva de comprar– Rubén reía bajo– Ella es muy indecisa y las filas de los kioscos pueden ser algo largo a veces.
—No. Seguro compra unos chocolates, papas y quizá unos caramelos– Decía con tranquilidad Yasmine– Por mientras sigamos con los ejercicios chicos, vamos– Aplaudía mientras cada uno se ponía a ejercitar sus habilidades.
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