Los primeros brotes se hicieron presentes en los paisajes de Corea, anunciando el inicio de la primavera. Para algunos, una temporada maravillosa llena de color y amor, para otros, como Doo Gyu, una completa tortura.
Odiaba estas temporadas por el simple hecho de tener que regresar a clases. No le iba del todo mal pero amaba invertir su tiempo en videojuegos. Algo que solo podía hacer en vacaciones.
Él es un chico que se considera simple, con gustos simples. El estereotipo del adolescente friki que juega videojuegos y es ligeramente otaku.
Estas vacaciones en particular habían sido especiales para él. ¿Por qué? Porque normalmente Doo Gyu juega Sims 4 dando vidas dramáticas a sus personajes y esta vez, probó algo nuevo. Siempre se negaba a los juegos online porque odiaba la idea de socializar con gente desconocida, pero Han Keo, su mejor amigo, le convenció de unirse a "Dark Paradise". Un videojuego de aventura con personajes mágicos que promete avanzar y mejorar de nivel cada que te unas a un clan en especial. A Doo Gyu le convenció el diseño de los avatares y el estilo de ropa medieval. Las pantallas tenían una calidad preciosa y cada una tenía su toque de fantasía.
Su personaje es un príncipe del mundo del caramelo, y es gracioso porque es muy elegante y tan bonito como lo es realmente Doo Gyu. Cabe aclarar que él es abiertamente homosexual con su grupo de amigos, así que no se relaciona con muchas chicas dentro del juego.
Pero lo que realmente lo hizo especial e inolvidable fue conocer al rey del mundo oceánico. No sabía quién era la persona del otro lado, sólo sabía su nombre de usuario @satoru_12jun y que le alegró todo el invierno con sus mensajes. Era tan gracioso y lindo que rogaba todos los días por poder escuchar su voz. Le regaló sus risas y sus madrugadas. Compartieron tanto tiempo juntos que podía asegurar que era tan amigo suyo como Suho y Keo.
En ningún momento quiso presionar para que le revelara más de su identidad, y Doo Gyu creyó que tal vez contando más sobre su vida personal lograría que @satoru_12jun le dijera algo más… Pero no fue así. Podía percibir su miedo, él aún no confiaba del todo en Doo Gyu y aunque él tampoco reveló su nombre, sí le contó a qué escuela iba y cómo llevaba su vida fuera de los videojuegos.
—@bear_gyu03:
…No quiero ir a clases mañana T T
Quiero seguir hablando contigo…
—@satoru_12jun :
Yo tampoco quiero :ccccc
Descansa, osito
—@bear_gyu03 :
TE DIJE QUE NO ME LLAMES ASÍ, OTAKU
—@satoru_12jun :
Pero tu nombre de usuario dice bear, aguantate, perdedor
YA VE A LA CAMA
Si tenemos tiempo después de clases… Podemos jugar y te llamo
No me gusta hablar por chat
Me cuesta escribir rápido como tú.
—@bear_gyu03 :
Solo oigo excusas para oír mi dulce voz…
JAJAJAJAJA
Descansa, otaku, te voy a extrañar.
Doo Gyu suspiró. No era mentira que lo echaría de menos. Así que luego de aquella partida divertida donde ganó unas espadas especiales con su amado "otaku" quien moría de ganas de conocer, se fue a descansar para dar paso al peor día de su vida…
Ese lunes se sintió raro desde que abrió los ojos por la mañana, su cabello estaba alborotado y nada parecía querer salir bien. Su hermano lo sacudió de la cama para despertarlo, su madre le gritaba que llegaría tarde a la ceremonia de iniciación y su padre… bueno, su padre solo existía. Intentó hacer todo lo posible para verse decente pero aun cuando había controlado su cabello largo con una coleta, su uniforme no se veía ordenado. Doo Gyu solía tener un aspecto despreocupado con la camisa por fuera de sus pantalones, cadenas extras al uniforme formal y su mochila llena de pins y colgantes de sus personajes favoritos.
Doo Gyu corrió e intentó llegar a tiempo, pero cuando estaba por llegar a la entrada de la escuela fue interrumpido por una mano que tironeó de su mochila tan fuerte que casi lo botaba al suelo. Volteó con todas las intenciones de defenderse de su agresor pero cuando enfocó su vista hacia abajo notó que no era ni nada menos que Gaara, su prima materna.
—Tú…—hizo una pequeña pausa. —¿Qué demonios te pasa?
—Shhh, cállate y sígueme Doo…—susurró ella atreviéndose a tomarlo de la mano para llevárselo a un rincón más alejado del resto de los estudiantes que iban llegando al instituto.
Fue bastante obediente al dejar que su prima lo arrastre, no entendía nada de lo que estaba pasando y aun estaba medio dormido así que tampoco tenía fuerzas para oponerse.
—Me separé de Seo Jun. —soltó ella como si le interesara a Doo Gyu..
—¿Y a mí qué? ¿Quién es él?
—Oh, por dios, Doo… Es tu compañero de clases… —Gaara empujó ligeramente a Doo Gyu, frustrada por el poco interés de su primo.
—¿Qué? Para mí solo existen Suho y Keo, el resto son NPC 's.
—No puedes ser así, Doo…
—Bueno, sí, sí puedo… Pero mmmh… ¿Por qué debería importarme tu ruptura?
—Veras…
Entonces Gaara le explicó que Seo Jun nunca quiso terminar con la relación, al punto de volverse muy insistente. Doo Gyu quiso saber qué pasó, pero su prima no tuvo intenciones de dar demasiados detalles. Solo había sido raptado por ella porque necesitaba ayuda, y quería un novio falso para que Seo Jun dejase de ser perseverante. Doo Gyu sugirió que podía ser Keo o Suho pero Gaara se negó, ya que ella se había adelantado a su plan y le había dicho a Seo Jun que Doo Gyu era su nuevo novio.
—¿¡Qué demonios te pasa!?
—Oh, vamos, Doo, nadie aquí sabe que somos primos. —murmuró ella como si no fuera algo grave. Pero Doo Gyu ahora estaba preocupado, odiaba ser el centro de atención y su prima no era alguien de bajo perfil.
Gaara pertenecía al club de teatro junto a la hermana de Keo, y a un chico que siempre veía a lo lejos como su amor platónico… Su prima estaba arruinando la posibilidad de tener un romance adolescente, y sí, sabía que al ser gay no era algo que pudiese suceder con facilidad pero siempre tenía la esperanza de experimentar el amor. Un amor real, y no uno virtual, aunque moría de ganas de conocer a su "otaku".
—No puedo creer que me hagas esto. —dijo frustrado.
—No seas dramático, dios, solo será por el primer semestre ¿si? —se quejó la muchacha tomando la mano de Doo para entrelazar sus dedos como si no estuviesen a punto de vomitar por dentro. "Es una pésima idea", pensó el más alto, y sin embargo, allí estaba… caminando hacia la entrada de la mano con su prima y una tonta sonrisa nerviosa se dibujó en su rostro. —Disimula mejor, pensarán que estás sufriendo… —lo regañó Gara, pero a Doo Gyu le costaba verse natural.
—Deberás pagarme…
—Dios, sí, te lo compensaré, idiota.
—¡Más idiota tú por mentirle a tu novio!
—EX… EX novio, Doo… Joder.
Él no quería hacer contacto visual con nadie pero una voz lo alertó y ése era su mejor amigo, el más escandaloso de todos… Han Keo. Su cara lo decía todo; no podía creer lo que estaba viendo. Él fue el primero en saber que me gustan los chicos, y la estupida de mi prima se colgó de mi brazo cariñosamente como si realmente fuera mi novio.
—¡Gyuuu!
—Mierda, baja la voz, Keo… —murmuró deseando que todos dejaran de verlo. —Luego te explico. —intento hacerle señas con un movimiento de cabeza, pero Han, bueno… él no captaba demasiado rápido los mensajes.
—¿Ella qué carajo es? ¿Qué está pasando? ¡Suho, ven aquí!
—Yo soy su novia. —respondió de inmediato mi prima sin titubear, y Suho se le rió en la cara hasta el punto de casi llorar de la risa. Pero mi cara seria y la de Gaara los hicieron callar creando un silencio incómodo.
—Sí, chicos, ella es Gaara… mi novia… —dijo entredientes haciéndole miradas a sus amigos con intención de que estos cerraran la boca de una buena vez. — Después… les contaré todo ¿sí?
—Okay, okay… —murmuró Suho mirando horrorizado mientras se llevaba lejos a Han que no dejaba de hacer un escándalo por la situación. Beomgyu amaba a su mejor amigo, pero a veces… solo a veces realmente quería ahorcarlo y no de una manera sexy.
Una vez dentro del instituto, Doo le suplica a su prima que lo deje en paz porque ya no soportaba la forma en que todos lo veían como si fuera una celebridad cuando siempre había pasado desapercibido. Gara se despidió de él con un beso en la mejilla que casi hace desmayar a Doo Gyu de la impresión y le advirtió que a partir de ahora compartirán el almuerzo juntos.
No podía creer que comenzara el semestre de esta manera, y mientras caminaba hacia su primera clase, que por suerte NO comparte con su prima, cuatro manos lo arrastraron al baño más cercano.
—¿Puedes explicarnos ahora Gyu? —dijeron sus amigos al unísono acorralando contra la pared a la pobre víctima.
—¿Tiene que ser ahora? Ya casi toca la campana… —se quejó el mayor de los tres poniendo los ojos en blanco; su paciencia estaba a punto de estallar.
—Oh no, no nos hagas esas caras Doo Gyu. —reclamó Suho levantando su dedo índice para apuntar a Doo Gyu y recriminarle. — Vienes a clases, y nos enteramos de que tienes una novia cuando pasamos todas las vacaciones jugando juntos. ¡Juntos! Y nunca nos dijiste nada, solo nos hablaste de ese chico raro que conociste en Dark Paradise y ahora nos dices que ya no eres gay o ¿qué demonios pasó en estas últimas 24 horas?
—Eso… eso que dijo Suho…—dijo Keo dándole palmaditas al menor sobre su cabeza, provocando que Suho se avergüence por el hecho de ser un enano al lado de nosotros dos.
—¡Ya! Tienen razón… ah… Gaara no es mi novia.
—No entiendo… —interrumpió Keo.
—Shhh, silencio, déjame terminar.
Entonces Doo Gyu intentó resumir lo más rápido posible la situación con su prima. No era fácil para él porque a penas lo venía procesando también. Solo les pidió que entendieran y que lo ayudasen también con la farsa, porque bueno, Keo solía ser de lengua floja y a pesar de que estaba disgustado con lo que estaba pasando, Doo Gyu quería mucho a su prima. Cuando la campana sonó fueron al salón de clases pero antes de siquiera cruzar el umbral Suho hizo una pregunta que no debió. No en ese momento.
—¿Y quién es el ex de Gaara?
—No lo sé, un tal Seo Jun… —respondió con poco interés, y no pudo seguir con la conversación porque un idiota gigante lo empujó para ingresar al salón. Doo Gyu era notoriamente más alto que Suho, pero ese imbécil, que ni se fijó en que él estaba por entrar primero, era muchísimo más alto y hasta quizá tenía más cuerpo que Doo. —Mierda… —se quejó en voz baja.
—¿Tan temprano insultando, Choi Doo Gyu? —lo regaña el profesor que entró detrás.
—Oh, lo siento, profesor.
—Espero no se repita y vayan a tomar asiento ya mismo. —dijo el hombre regordete irritado desde temprano.
Entre suspiros buscó el mismo lugar de todos los años, al lado de la ventana y un asiento delante del último. Pero cuando estaba por tomar asiento dudó, ya que estaba ese chico alto que lo empujó sentado en el último asiento mirándolo como si quisiera arrancarle su hermoso cabello. Doo Gyu tomó asiento indignado, no entendía porque el chico se enojaba cuando él fue quien lo empujó primero como si fuera la nada misma.
Hasta que por supuesto… tomaron lista.
—¿Choi Doo Gyu?
—¡Presente!
—¿Choi Seo Jun?
El corazón de Doo se paralizó por un instante, repitiendo un "NO, NO, QUE NO SEA ÉL" en su cabeza. Pero podía sentir las cuchillas en su espalda.
—Presente. —respondió la persona que estaba detrás suyo, y juraba que podía sentir su aliento cerca de su nuca como si fuera una bestia furiosa a punto de comérselo vivo.
No tuvo el valor de voltear y en toda la hora de clase estuvo tenso e incómodo. Seo Jun no dejaba de escanear todo su cuerpo hasta alborotar por completo su estabilidad emocional. Doo Gyu no entendía porqué estaba tan asustado, pero luego recordaba que Seo Jun era mucho más alto e intimidante. Se maldijo internamente por sentarse allí de todos los lugares posibles…
Lo peor de todo, es que Seo Jun fue su compañero de curso en los últimos años pero Doo Gyu jamás le prestó la atención suficiente porque no le interesaba relacionarse con el resto. Además de que Seo Jun antes de ingresar al club de atletismo era mucho más bajo y delgado de lo que es hoy. Pero, claro, esos detalles Doo Gyu los desconocía, porque para él era un completo desconocido.
—Así que por esto… me dejó Gaara. —escucho hablar al más alto una vez que la campana sonó anunciando la hora de almuerzo. Doo Gyu se levantó de su asiento dispuesto a ignorarlo pero entonces. — No sabía que le gustaran niños ratas homosexuales.
Doo Gyu suspiró pesado, intentó contar hasta diez pero antes de que siquiera sus amigos pudieran venir a buscarlo para ir al comedor juntos él se volvió dispuesto a enfrentar al chico de cabello oscuro.
—¿Tienes algún problema conmigo?—se miraron fijamente a los ojos, y Doo Gyu podía jurar de que si las miradas mataran él ya estaría bajo tierra.
—Solo digo lo que veo, enano. ¿Te molesta?
—Joder, ¿tanto te duele que sea más bonito que tú? —empujó a Seo Jun con una de sus manos. Alertó inmediatamente a sus amigos. Sabían perfectamente que Doo Gyu era una bomba de mecha corta.
—Por eso, no eres guapo, solo eres bonito como un sucio homosexual. —respondió el alto con una sonrisa de lado disfrutando del enojo de Doo Gyu.
—No, no, no… Vamos a almorzar, Gyu. —interrumpió de inmediato Suho cuando vio las intenciones de su amigo, y con ayuda de Keo arrastraron al muchacho fuera del salón.
No dijeron nada hasta estar lo suficientemente lejos de Seo Jun.
—¿¡Estás loco, Doo Gyu!? ¿Cómo vas a meterte con Seo Jun? —exclamó Suho de inmediato.
—Tu prima… es una idiota. Te acaba de enviar a la horca. —dijo Keo aterrado.
—Probablemente no lo sepas porque vives en las nubes pero, joder, Seo Jun es uno de los chicos más populares del instituto.
—Él y sus amigos dan miedo… Son miembros del club de atletismo. Seo Jun no es tan bueno como Yeon Bin pero todas las chicas quieren estar con él. Y su amigo Jake… es el peor, es capaz de hacerte trizas.
—Y no hay que olvidarnos del imbécil de Sung Hwang. —Suho puso sus ojos en blanco sin poder evitar hacer una expresión de desagrado cuando lo mencionaron. — Ese estupido cree que con dinero puede pasarte por encima.
—Yo… honestamente, no sé quienes son. —murmuró Doo Gyu avergonzado y sus dos amigos suspiraron resignados por la falta de interés del mayor ante su alrededor.
Él estaba por ir a una mesa a solas con sus amigos, y había olvidado por completo que ahora tenía una novia, así que se sorprendió mucho cuando Gaara apareció molesta tomándolo del brazo para arrastrarlo con ella. Pero así como él fue a la mesa de los amigos de Gara, Doo Gyu arrastró a los suyos para no estar solo en esto.
Lo bueno era que Suho y Keo se llevaban muy bien con todos ellos, especialmente porque estaba la hermana pequeña de este último… Billie es una niña muy bonita, y estaba casi seguro que si fuera heterosexual le bajaría la luna entera, y a su lado estaba ese chico… Aquel del club de teatro que llamaba la atención de Doo Gyu. Su prima dijo que se llama Taemin y que no es muy charlatán como ellos. Él no dejaba de mirar a Doo Gyu cada vez que podía, y éste no tardó en ponerse nervioso sin poder comer correctamente por miedo a ser juzgado por el chico actor.
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