-Snif...Pero...snif...¿Por qué?- Le dije a Roxy. Estaba tumbado abrazando a una almohada mientras lloraba.

-Porque Emilio es un cabrón, Isaac.- Roxy estaba sentada a mi lado acariciándome el pelo. 

-Pero snif...Pero yo le quería.- 

-Ya...Pero la vida es injusta. Es que vaya tío te has buscado.- Roxy se levantó.

-Pero no te vayas snif, que me gusta que me acaricien el pelo.-

-Voy a mandarle un mensaje a Ricky, no me voy.-

-Ah, vale.- Volvió a sentarse y a acariciarme el pelo. 

-¿Puedo poner música?- Asentí como pude. Puso “Outside” de Staind.

*But I'm on the outside, I'm looking in

I can see through you, see your true colors

'Cause inside you're ugly, you're ugly like me

I can see through you, see to the real you*

-Ya está Isaac, ya ha pasado. ¿Qué te parece si me quedo a dormir?-

-Sí, por favor. No creo que aguanté estar solo tanto rato.-

-Vale, pero voy a tener que ir a por mi pijama, ¿me espera? No tardaré nada, te lo prometo.- Asentí de nuevo.

-Está bien, aprovecha y póntelo tú también.- Roxy se levantó y se fue, yo me levanté como pude y me puse mi pijama. 

A los pocos minutos entró Roxy con el pelo en una coleta y en pijama.

-Ya estoy. Ves, no he tardado nada.- Me senté en la cama mientras intentaba no llorar más. Roxy se sentó a mi lado.

-Isaac, se que no es de mucha ayuda que diga esto, pero si tienes que llorar puedes llorar. Yo no te voy a juzgar.- Las lágrimas salieron solas, yo no les había dado permiso de salir, pero aun así salieron.

-Roxy...- La llame.

-Dime.-

-Tú...¿Tú no tenías que cuidar de Ricky?-

-¿Eh? Ah, no. Ricky no ha bebido.-

-Ah, vale.- Me limpié como pude las lágrimas. -Oye Roxy.-

-¿Qué pasa?-

-¿Tú no quieres ir a pasar la noche con Ricky? Entiendo que ella sea más importante que yo.-

-Si quieres que me vaya dímelo, eh.-

-Yo no quiero...Pero no quiero que te quedes conmigo cuando preferirías estar con alguien más.-

-Isaac que no me estoy casando contigo, solo te estoy cuidando está noche.- 

-Aparte, ahora me necesitas más que nadie. Eres mi amigo y quiero cuidar de tí.- Intenté sonreír, pero no me salió. -Ahora, estarás destrozado, así que a dormir.- Me tumbé en la cama. 

-Roxy.-

-Dime.- Dijo alargando la palabra.

-Creo que puedo pasar la noche solo.- Roxy me miró.

-¿Estás seguro?- Asentí. -Está bien, pero si necesitas algo mándame un mensaje.- Volví a asentir.

-Buenas noches corazón de melón.- Dijo en broma.

-Buenas noches.- Le dije mientras ella salía de la habitación. Cerré los ojos pero cada vez que lo hacía veía la imagen de Emilio besando a la rubia esa...Rubia...Rubia...Rubia...

-Rubio.- Abrí los ojos enseguida al escuchar ese apodo.

-Llevo intentando despertarte quince minutos ¿y te despiertas cuando te digo rubio? Qué rarito eres, tío.- Dijo Roxy y Ricky río.

-¿Qué quieres Roxy?- Dije tapando mi cara con una almohada.

-Vamos a la playa.- Dijo quitándome la almohada.

-No quiero.-

-Me da igual. No es una pregunta es una afirmación.-

-Es muy pronto, déjame.-

-No. Tienes cinco minutos, te esperamos fuera de la habitación.- Y bueno podría haberme encerrado en la habitación y no salir, pero decidí que no valía la pena estar llorando todo el día por alguien a quien no le importo. Me puse el mismo bañador que ayer aunque Roxy y Ricky se habían puesto otro.

El de Roxy.

El de Ricky.

-Venga Isaac, ¿cogemos fruta?- Dijo Roxy feliz.

-Sí, necesito algo dulce para alegrarme el día.- Estábamos pasando por el restaurante para pillar la fruta.

-Venga Abril, tienes que beber agua.- Escuchamos esa voz conocida en una mesa alejada de las personas.

-Déjame en paz Choripán, tráeme un bocadillo o algo.- Como no, eran Charlie y Abril.

-Típico de Abril.- Dijo Roxy mientras negaba repetidas veces con la cabeza. -En fin. ¿Qué fruta queréis?-

-No sé.- Dijimos Ricky y yo a la vez.

-Pues bueno, cojo de está que son varias y arreglado.- Roxy puso la fruta en un táper de plástico y nos fuimos hacia la playa. Pusimos un par de toallas en la arena y nos sentamos a comer. 

-Pues se está bien aquí.- Dijo Roxy.

-Sí...Hoy no hace mucho calor.- Dije.

-No, se está bien.- Dijo Ricky esta vez. 

-¿Después qué os apetece hacer?- Nos preguntó Roxy. 

-Morir.- Las dos me miraron. -Digo, dormir.- 

-Si, dormir.- Dijo en tono irónico Roxy. Me hubiera gustado distraerme y no pensar en Emilio pero no paraba de ver parejas por la playa, si hasta tenía una pareja a mi lado. 

-¿Isaac?- Dijo alguien a mi lado. Gire la cabeza.

-¡¿Greg?!- Dije sorprendido.

-¿Greg?- Dijo Roxy confundida, y miró a Ricky que parecía que conocía a Greg.

-Ostia, Ricky.-

-Greg tío, no sabía que ibas a venir a la playa, te hubiera invitado.- Roxy y yo nos miramos confundidos.

-Espera un momento...¿Vosotros os conocéis?- Preguntó Roxy. Ambos asintieron.

-Sí, es uno de mis compañeros de clase.- Le dijo Ricky.

-Espera...¿Y vosotros de qué os conocéis?- Dijo Roxy señalándonos a Greg y a mi.

-Es el tío que te dije ayer en la fiesta.- Le contesté.

-Aaah vale.- 

-Pensé que no te acordarías de mí.- Me dijo Greg y yo sonreí.

-Lo mismo digo.- Ambos sonreímos.

-¿Qué pasó entre estos dos ayer?- Le susurro Ricky a Roxy.

-Luego te cuento.- Le respondió en un susurro Roxy.

-Emmm bueno...yo...-

-¿Te gustaría ir a por un helado?- Le pregunté. ¿Quería distraerme no? 

-Em, vale.- Me levanté y fuimos hacía la heladería del otro día. De camino no hablamos mucho.

-¿Y tú de qué vas a querer tu helado?- Me preguntó.

-No sé...Creo que de chocolate, es mi favorito.- Él asintió. -¿Y tú?- Le pregunté.

-De fresa.- Asentí.

-Y...¿Cuántos años tienes?- 

-Bueno...tengo catorce pero en unos meses cumplo los quince. ¿Y tú?-

-Tengo diecisiete, los cumplí hace un par de meses.- ¿Sería demasiado mayor para mi? Supongo que sí. Llegamos a la heladería y pedimos nuestros respectivos helados.

-Mierda no he traído la cartera.- Dije en un susurro.

-¿Eh? Ah, nono da igual, yo pagó.-

-¿Qué? !No, no hace falta!- Le dije enseguida.

-No pasa nada, en serio.- Me dijo sonriendo.

-Sí qué pasa. ¡Agh como odio deber dinero a la gente! Cuando lleguemos al hotel te lo pago.-

-Que no hace falta.- Dijo levantando las manos para restarle importancia.

-Te lo voy a pagar en cuanto pueda, te lo prometo.-

-Si así te tranquilizas entonces vale.- Asentí y cogimos nuestros helados pagó y nos fuimos. Estábamos de vuelta en donde estaban Roxy y Ricky, que estaban abrazándose mientras estaban tumbadas. Carraspeé la garganta.

-Ya hemos vuelto eh.-

-Felicidades.- Dijo Roxy mientras le acariciaba el pelo a Ricky.

-Suficiente lesbianismo, ¿no ves que estoy destrozado por lo que me pasó ayer?- Dije mientras ponía cara de pena y me ponía una mano en la frente para hacer más drama.

-Que tu estés triste no significa que los demás debemos estarlo. Así que jodete.- Dijo Roxy mientras se quitaba sus gafas de sol.

-¿Te parece bonito decirme eso?- La verdad es que no afectó, pero me gusta hacerme el dramático.

-Sí.- Greg río levemente. ¡Ostia que yo le debía dinero!

-Bueno, por ahora podéis seguir con vuestro lesbianismo, yo tengo que ir a por una cosa.-

-¿Sabes que porque me hayas dicho eso igualmente no pensaba parar?-

-Aja lo que tu digas. Vamos Greg.- Le dije mientras movía una mano en señal para que me siguiera, y fuimos hacia mi habitación. 

-Pasa pasa y veras mi casa.- Ambos reímos.

-No creo que tarde mucho pero igualmente toma asiento.- Greg se sentó en mi cama mientras yo buscaba en mi mesita de noche.

-Y bueno...Cuéntame algo de ti, aparte de que se te da muy bien escuchar...O fingir que escuchas.- Le dije ya que mientras caminábamos le empecé a contar cosas y él solo escuchaba. 

-Bueno...Yo en realidad no soy de España, soy de aquí de Grecia.-

-Interesante.- Dije mientras seguía buscando la dichosa cartera.

-Emmm, bueno esto...No se que más decirte.- 

-¿Qué te gusta hacer?-

-Me gusta hacer skate.-

-Skate...Siempre me ha interesado el skate.- Greg sonrió.

-Si quieres un día podría enseñarte.-

-Sí, eso estaría bien.- Dije sin darle mucha importancia a lo que decía. Él río.

-Bueno...También soy Bi-

-¡¿Dónde coño está la puta cartera?!- Le corté. Sonreí. -Perdón.- Me sonrío.

-Nono, tranquilo no es nada.- Me dijo.

-¿Abril cómo puedes hacer eso?- Escuchamos los dos.

-Tú...¿Tú lo estás escuchando no?- Le pregunté y él asintió.

-A ver, que no se va a enterar, que solo le hemos gastado cinco euros.- Dijo Abril mientras entraba con mi cartera en su mano y Charlie detrás.

Los dos se sorprendieron al verme. -Eeeh, ¿Isaac qué haces aquí?- Preguntó Abril con una sonrisa nerviosa.

-Es mi habitación, ¿recuerdas?- Ella asintió. -¿Y tú qué haces con mí cartera en la mano?-

-Yo...Estem...- Dijo nerviosa.

-Es mi culpa.- Dijo Charlie mientras entraba. -Mandé a Abril por mi cartera...y bueno se confundió. Ya te pago los cinco euros que nos hemos gastado.- Charlie fue a por su cartera y me dio el dinero.

-Y mi cartera. Por favor.-

-Ah, sisi.- Dijo Abril y me dio la cartera. -Bueno...Nosotros nos vamos.- Dijo Abril, cogió de la mano a Charlie y salieron corriendo.

-Dios mío dame paciencia, porque como me des fuerza.- Volví a mirar a Greg y sonreí avergonzado. -Esto...Aquí tienes lo que te debía.- Le dije mientras le daba el dinero.

-Gracias, aunque no hacía falta.- Se levantó de la cama-...Yo prefería otra cosa.- Dijo y se fué.