narra Jack: 

estaba llegando al trabajo con unos ánimos por el suelo, y es que al parecer alcohol más noche de rock no es una buena idea. ¿Pero al final por la ciencia cierto?

fui el primero en llegar a pesar de mi gran noche, y ahí me quedé esperando, y esperando, y esperando. hasta que escuche una voz conocida y familiar. era Hana!

Hana: ¿Jack que hacer aquí? —decía con un toque burloso y algo extrañado.

Jack: espero a que llegue el que habré la puerta, ya se están tardando.

Hana: ¿y no crees que la razón por la que no han llegado es porque hoy es domingo?

Jack; ¿espera— me quede analizando por un rato para llegar a la conclusión de que tenía razón, hoy era domingo— cierto, ja, ja, ja, y tú? ¿Que haces por aquí?

Hana: vine a pasear y ver que hacía, ya que los últimos días me la he pasado encerrada componiendo

Jack: también compones, ¡qué genial! ¿Y qué música haces?

Hana: hago de todo tipo, peor me encanta hacer experimental. y tú?

Jack: na’ yo solo toco la guitarra y nada más— dije mientras empezamos a caminar por el lugar, íbamos charlando y riendo hasta que tuve la intriga, de escuchar su música— oye Hana, ¿podría por cierto escuchar tu música?

Hana: claro— dijo mientras que sacaba de su bolsillo un iPod.

Jack: ¡WOW! Tienes un iPod!

Hana: sí, lo conseguí recientemente— decía mientras me ponía los audífonos.

 Describir estancación sería una mezcla de jazz, con hip hop, pero yéndose más al punk o a la discoteca, era algo difícil de explicar, como si te comieses unos hongos podridos donde la mitad de tu cerebro está consciente y la otra reacciona por instinto. algo que expresaba… curiosidad.

Hana: ¿y que te pareció?

 

Jack: …— en un limbo…

Hana: Jack!?

Jack: ¡ah sí! Me pareció buena, pero algo hipnotizante, ¿con que te inspiraste?

Hana: una pequeña situación que viví cuando era más joven que me hizo hacer cosas que ahora me arrepiento, pero bueno al fin y al cabo la pude superar.

Jack: qué bueno que la hayas superado, pero como fue la situación que te llevo a hacer tremenda canción, ja, ja, ¡ja!

Hana: simplemente no preguntes mucho, ja, ja, ja.

Seguimos caminando por la plaza, entrando a tiendas a ver, comenzamos a conocernos más y más. y a pesar de que el día concluyo, seguimos hablando por chat, o sea MeWe. la verdad, Hana es una persona muy interesante y divertida al ser verdad y quizás fue por eso que nos hicimos aún más amigos, quizás por nuestras rarezas y así nos la pasamos, haciendo bla-bla-bla y más bla. 

una semana después:

esta noche, voy a ir a la casa de Hana después del trabajo, ya que ella me invitó a que charlemos, compongamos y bebamos y así fue, después del trabajo, ella me esperó en el estacionamiento en su furgoneta.

me dirigí donde ella y me monté en la furgoneta.

Hana: ¿buenas Jack, listo?

Jack: ¿para qué? — digo algo intrigado.

Hana: ¡para esto!

el carro empezó a avanzar rápidamente y a toda velocidad por la carretera, las ventanas estaban abajo, asique podía sentir como el aire me golpeaba.

Hana: y listo ya llegamos.

Jack: ¿todo despeinado— en serio? Eso fue rápido

Hana: es que tengo mi ruta.

Jack: ¿ruta? Para mí fue tu velocidad

Hana: un poco de ambas, vamos entremos.

al entrar a la casa, mes ente en el sofá y saque mi guitarra de su mochila que la traía puesta, después Hana se sentó al lado y acerco su sintetizador. ambos comenzamos a charlar y platicar para después iniciar con lo bueno, la música, íbamos tocados pequeños acordes, acordes que se transformaron en melodías y melodías que se volvieron lentamente una canción. mientras íbamos tocando, íbamos tomando lentamente de nuestras botellas y por increíble que me costase creer, Hana termino la suya primero!

 Jack: ¿cómo lo haces tan rápido?

Hana: no sé, siempre comí y bebí rápido en toda mi vida,

Jack: yo no, yo siempre hacía todo lento desde pequeño— dije de forma burlona.

Hana: ¡sí! Espera, déjame traer más botellas.

Jack: ¡más! ¿Y no te es suficiente?

Hana: ya sabes, mientras mejor.

Jack: está bien— mientras ella iba a la cocina por más yo apoye mi cabeza sobre el brazo del sofá, lo que me dejo tener visión de la pared, una pared con diversas fotos.

normalmente, las personas que cuelgan sus fotos en la pared hacen collages de cosas como sus peces, su familia, sus momentos, etcétera, pero note algo, y es que todas parecían nuevas y muy recientes, bueno, quizás se está mudando recién ahora o decidió dar un cambio.

pero después me percata de algo, una foto que no era nueva, ni reciente, y de hecho era la única foto donde se podía haber a alguien más. Primero estaba con unos pantalones de tela que le llegaban hasta las rodillas y una camiseta blanca, y al lado había un joven con una camiseta de rayas y unos vaqueros, con una sonrisa y un gesto con la mano, no sé cómo, pero al ver esa foto me sentí teletransportado entonces pese a ser ajeno a él, y al ver más de cerca a ese joven, me di cuenta de que era yo.

pero, como podría estar yo ahí? Si ni siquiera la conocía antes, o si tan siquiera la había escuchado, o plómenos con su nombre. porque quizás, Hana y Jessica, eran la misma persona.

Hana: ¡ya llegué! — se para ver qué Jack estaba parado en frente del cuadro— Jack, que pasa?

Jack: ¿una pregunta Hana, me recuerdas?

Hana: ¿a qué te refieres?

Jack: ¿sabes de mí?

Hana: ¿Jack que dices?

Jack: ¿Hana, eres Jessica?

Hana: … Jack! ¡No lo puedo creer! ¡Eras tú!

en ese momento veo como ella ponía todo en la mesa y se acerca a mí y me da un abrazo.

Hana: perdón, no savia que eras tu Jack, escape sin razón y deje todo, y ahora estamos de nuevo juntos.

Jack: lo sé, no te preocupes, ya todo paso, ya todo mejoro.

estamos los dos sentados en el sofá viendo al piso, con un silencio inúndate.

Jack: ¿y como llegaste a aquí?

Hana: esa tarde que discutí con mi padre, decidí escaparme me sentía frustrada, decepcionada y me odiaba tanto a mí mismo que tomé esa decisión sin pensar y con mis ahorros irme lejos a otra ciudad, ya había investigado antes lo suficiente como para irme por mi cuenta, aunque las primeras noches tuve que dormir en las calles o en tiendas. después me establecí aquí en esta ciudad y conseguí un trabajo como mesera, para después dedicarme como pasatiempo a la música. Quise habría mi banda y con mis ahorros me compré una furgoneta en el basurero, pero no pude tener ningún integrante, así que decidí ser solista, luego te “conocí” y el resto ya lo sabes.

Jack: desde el día que te fuiste te he estado buscando y no te encontraba por ningún lugar y nunca espere reencontrarme contigo en la misma ciudad donde me mude. y poder estar con tifo de nuevo, es algo que me hace sentir bien, tranquilo y aliviado, de que aún sigas viva y no te haya pasado nada.

 Hana: perdón por no decirte nada

Jack: no digas perdón.

  

Jack: tú solo querías paz

Hana: gracias

Hana: bueno, asique te llevo a tu casa.

Jack: si porque mira, ya son las dos de la mañana.

Hana: bueno, pues yo te llevo, tú me guías

Jack: está bien

en el camino, conectamos mi reproductor de MP3 con la radio del carro y empezamos a escuchar música mientras sentíamos como el viento nos chocaba en la cara y como una enorme sensación de nostalgia y familiarización nos rodeaba, nos sentíamos niños de nuevo y todos nuestros problemas se fueron, porque lo que estaba pasando ahora, era lo que importaba.

Hana: ¿aquí es?

Jack: sí, aquí es donde vivo yo y mis compañeros.

Hana: está bien; asique nos escribimos el próximo día

jack: ¡sí, y ha! Porciento, quiero ser parte de tu banda, quiero ser el segundo integrante

Hana: ¡en serio! Gracias



Jack: no hay de que, nos vemos

Hana: cuídate jack

jack: igualmente Hana

después de eso vi como ella se echaba hacia atrás y se iba por la carretera oscura mientras sonaban los insectos de fondo.  cuando mis ojos ya la perdieron, me voltee y entre a la casa. para descansar de esta noche musical.