-¿quien eres? ¡No me hagas daño!- Amaris se levanto de la cama 

-tranquila no deseo lastimarte, eres una hada oscura ¿no?

-amaris miro a la chica por un rato -si, y tú eres...?-

 -claro olvidaba presentarme. Mucho gusto soy la princesa luz, mi nombre es Helen, espero que estés bien aquí ¿cuál es tu nombre?- Helen sonrió y amaris le devolvió la sonrisa aún que desconfiada 

-soy amaris, princesa oscura- Helen la miro asombrada 

-princesa eh, mira me encantaría hospedarte bien y adecuadamente, pero como tú sabrás las hadas oscuras no tienen permitido salir y aún peor estás en el reino luz, si te descubren probablemente te vuelvan a encerrar y intuyo que no quieres eso- Helen se sento en su cama 

-aun deberías descansar por qué no te acuestas un momento y puedo pedir que traigan algo de comer- a Amaris se sentó a su lado permaneció sin decir ninguna palabra 

-es una lastima que debas huir ¿Por qué escapaste?- Helen miro a los ojos a Amaris

-yo.. yo quería conocer el mundo, vivir toda mi vida encerrada, y dentro de dos días será mi cumpleaños número 16, y mi madre probablemente quiera esposarme, así que quería conocer el mundo antes de eso- (las hadas pueden casarse a partir de los 16) 

-ya veo, yo tengo 17 y mi madre esta buscando un esposo para mi- helen tomo de las manos a Amaris y la miro a los ojos 

-es una lastima tener que estar con alguien a quien no amas...- estubieron un momento mirandose fijamente, un leve sonrojo apareció en las mejillas de Helen. Golpean la puerta

-¡Amaris escondete! Amaris se metió en el camerino y Helen abrió la puerta, luego entro la reina luz

-madre, ¿que te trae a mis aposentos..?- Helen hizo una reverencia

-¿acaso no puedo visitar a mi hija?-

-vamos madre, tu sabes que no vienes hasta aquí solo para "visitarme"- la reina acaricio la mejilla de Helen

-eres muy inteligente hija mía, te enteraste que desapareció la hija de reina oscura, la tonta pensara que nosotros la secuestras seguro, pero bueno a lo que vine, mañana al mediodía vendrá un hada muy importante de fuego junto a su hijo, para hacer un acuerdo y que te cases con el- Helen la miro furiosa a su madre

-ya te eh dicho que aún no pienso casarme-

-eso a mi no me interesa, tu te casarás igual, el chico y su familia tienen mucho poder y te podrían ayudar a convertirse en la reina-

-madre yo no quiero ser reina, prefiero que mi hermana ocupe el puesto- Helen miro a la reina como desafiando la, la reina le metió una bofetada a Helen

-espero que no digas más tonterías, tu te casarás y punto- así como la reina dijo eso, se marcho. Las lágrimas comenzaron a cubrir las mejillas de Helen y Amaris salió del camerino

-Helen..¿Estás bien..? Yo eh, puedo ayud-

-vete-

-pero, Helen..-

-¡Solo vete! No me importa si no tienes adónde ir, ¡Vete ya!- Amaris corrió fuera de la habitación de Helen...