La atmósfera en el restaurante se vuelve tensa.

Asakura sonríe con confianza mientras Taro lo mira fijamente.

Asakura: “¿No vas a responder, Matsumoto?”

Taro aprieta los puños. Yuri observa atentamente, sintiendo la tensión en el aire.

Taro: “No tengo nada que ver con ustedes dos”.

Asakura se inclina ligeramente hacia adelante.

Asakura: “¿Estás seguro? Porque la última vez que te vimos, dejaste un charco de sangre en ese bar”.

Yuri está sorprendido.

Yuri (pensando): “¿Un bar? ¿De qué está hablando?”

Asakura se levanta lentamente.

Asakura: “No te preocupes, no estoy aquí para matarte… todavía”.

Taro frunce el ceño.

Taro: “Entonces, ¿qué quieres?”

Asakura saca un sobre de su abrigo y lo deja sobre la mesa.

Asakura: “Solo un recordatorio de que el pasado nunca se va.”

Taro mira fijamente el sobre sin tocarlo.

Yuri siente que está presenciando algo grande.

Yuri (pensando): “Esto… es peligroso.”

Asakura le da a Taro una última mirada antes de darse la vuelta.

Asakura: “Nos veremos pronto.”

Taro observa a Asakura alejarse. Tiene la mandíbula apretada.

Yuri mira a Taro con duda: “¿Quién era?”

Taro toma el sobre y lo guarda sin abrirlo.

Taro: “Nadie importante.”

Yuri no le cree, pero decide no presionar más.

Afuera del restaurante, Asakura se sube a un auto negro donde lo espera un hombre con un cigarrillo en la boca.

Hombre misterioso: “¿Y bien?”

Asakura sonríe.

Asakura: “Está acorralado. Tarde o temprano cometerá un error”.

El coche arranca y se aleja en la noche.

Más tarde, en el apartamento de Taro, se sienta en la cama con el sobre en la mano.

Decide abrirlo.

Dentro hay una fotografía. Su expresión cambia de inmediato.

Taro (pensando): “No puede ser…”

La foto muestra una imagen borrosa del interior del bar esa noche… y Taro con un cuchillo cubierto de sangre.

Junto a la foto, hay una nota.

“Sabemos lo que hiciste”.

Taro aprieta la nota con fuerza.

En otro lugar, Yuri está sentada en su escritorio, investigando en su computadora.

Encuentra un viejo artículo sobre una masacre en un bar en Shinjuku.

Yuri (pensando): “¿Fue esto… Taro?”

Taro, todavía en su habitación, se cubre la cara con la mano, frustrado.

Taro (pensando): “No puedo huir de esto…”

“El pasado siempre vuelve, ¿no?”