Please note that Tapas no longer supports Internet Explorer.
We recommend upgrading to the latest Microsoft Edge, Google Chrome, or Firefox.
Home
Comics
Novels
Community
Mature
More
Help Discord Forums Newsfeed Contact Merch Shop
Publish
Home
Comics
Novels
Community
Mature
More
Help Discord Forums Newsfeed Contact Merch Shop
__anonymous__
__anonymous__
0
  • Publish
  • Ink shop
  • Redeem code
  • Settings
  • Log out

ANGELS [BL]

VII

VII

Jun 21, 2025

no recordaba con claridad en qué momento me había dormido los dedos de las manos, ni por qué le ardía tanto el rostro. Sólo sabía que había caminado demasiado. Tenía los labios partidos y el corazón latiéndome con la timidez de quien regresa a un lugar que no le pertenece. Pero volvi. Volvi solo, sin que nadie me llamara, sin una promesa que lo esperara al otro lado de la puerta. 

 El lugar seguía igual de sombrío y frío que cuando lo dejó. Ni un sonido, ni un gesto de bienvenida. Sólo ese silencio espeso que se colaba por las rendijas de los muros, y el olor a madera vieja mezclado con algo dulzón que no supo identificar. Al fondo del salón, sentado de perfil, estaba él —o eso crei—, la misma figura alta, fornida, casi inmóvil, observando fijamente un papel entre las manos como si contuviera los secretos del universo.

yo no me atrevi a hablar. Apenas cruze el umbral y lo vi allí, tan quieto, sinti que cualquier palabra sería una intromisión. Así que subi en silencio, despacio, sintiendo cómo cada escalón crujía bajo mis pies y lo delataba. La habitación seguía igual, sólo que ahora parecía más grande, más ajena. me deje caer sobre el colchón, boca arriba, y durante un rato largo me quede así, mirando al techo, tratando de recordar cómo se sentía el mundo antes de que todo doliera. 

 La noche pasó sin que pudiera dormir del todo. Y cuando el alba asomó apenas con un parpadeo tímido en el horizonte, lo único que me arrancó del sueño ligero fue el grito. 

 No un grito cualquiera. Uno rasgado, furioso, cargado de una rabia tan viva que lo hizo sentarse de golpe. 

 —¡Eres un imbécil! ¡¿Qué mierda te pasa, eh?! —la voz era tan fuerte que las paredes temblaron.
 —¡No me jodas! ¡Lo saqué porque estaba husmeando donde no debía! —otra voz, casi idéntica, rugió de vuelta. 

 Luego un estruendo. Algo se rompió. Vidrio, tal vez. O un jarrón. Luego otro golpe. Una silla arrastrada con furia. Insultos, gritos que se superponían, se mordían, se escupían con una rabia casi infantil.

Me levante sin hacer ruido. Sali del cuarto arrastrando los pies, como si el suelo pudiera tragarme si hacía el más mínimo sonido. Baje dos escalones y me quede allí, en medio del pasamanos, en la sombra. 

 Y entonces los vi. No era uno. Eran dos. Dos hombres idénticos. Altísimos. Uno con el cabello recogido y los ojos fríos, oscuros como un abismo. El otro con el cabello suelto, despeinado, los ojos encendidos en ámbar furioso. Se gritaban, se empujaban, uno tenía las mangas arremangadas como si estuviera listo para pelear, y el otro sostenía aún el mismo papel de la noche anterior, aunque ahora lo apretaba como si quisiera rasgarlo. 

 —¡Lo echaste! ¡Lo sacaste como si fuera un mueble viejo! ¡Un perchero maldito! ¡Ni una planta se bota así! —el de ojos ámbar lo empujó con el antebrazo.
 —¡Y lo volvería a hacer! ¡No tenías por qué traer a ese crío aquí! ¡Estaba manoseando mis cosas como un mapache con hambre! —el de ojos oscuros le respondió con un puñetazo al pecho que más parecía el codazo de un hermano molesto. 

 Trage saliva. El corazón se me aceleró como si fuera a escapárseme del pecho. ¿Dos? ¿Dos hombres? ¿Idénticos? ¿Eran… gemelos? ¿Eso explicaba todo? ¿Las miradas cambiantes, las actitudes opuestas, los silencios? ¿Todo? 

 —¿Qué pasa…? —musite sin darme cuenta, apenas un susurro desde la escalera. Ambos se congelaron. Como si alguien hubiera detenido el tiempo.

 Las cabezas giraron al mismo tiempo. Dos pares de ojos me miraron desde abajo.

 Uno parecía haberse tragado el fuego del infierno. El otro, el hielo del universo. Por un instante, nadie dijo nada. Sólo se escuchaba la respiración pesada de ambos. Y mi corazón, golpeando como una campana dentro de su pecho. 

 —¡¿Sabes que ese idiota te echó de la casa, verdad?! —gruñó el de ojos ámbar, señalando con el dedo al otro, con la furia de quien escupe lava. 
 —¡Sí, fui yo! ¡¿Y qué?! ¡Estaba tocando cosas que no le pertenecen! ¡Mis cosas, Belfegor! ¡Mis cosas! — espetó el de mirada fría, cruzándose de brazos como si estuviera a punto de pedirle al otro que se sentara para hablar como adultos.

 parpadee, confundido. ¿Ese? ¿El mismo que me  había dado comida sin decir una sola palabra? ¿El que me había dejado en una comoda cama? ¿Era el mismo que me había insultado y corrido como un perro? Me sinti como una pulga entre dos montañas. Con sus apenas 1.75, se veía ridículo entre esos dos hombres que fácilmente lo superaban por casi medio metro. De cerca, la diferencia era todavía más abrumadora. Uno medía 2.15 y el otro 2.14, según las proporciones. Era como estar entre dos titanes furiosos. Dos volcanes a punto de estallar. Dos demonios que parecían haber sido separados sólo por capricho genético y medio centímetro. Y … yo sólo un pedazo de polvo confundido.

 —O sea… son… —balbuceó— ¿gemelos? 
 Los dos se miraron entre sí y luego bufaron, como si esa revelación hubiera tardado demasiado.

 —Felicitaciones, genio —masculló el de cabello recogido, sarcástico. 2 —¿Te tomó todo este tiempo darte cuenta? —agregó el otro, frunciendo el ceño con fingido asombro. Yo no sabía si reír o llorar.

 me habían tratado como a un idiota durante días. me había culpado, me había callado, había dudado de mi propia percepción. Y ahora… ahora todo tenía sentido. Pero también dolía.

 Porque no lo supe antes. Porque se sintió estúpido.

 —¿Entonces cuál es cuál? —pregunte con un hilo de voz. —Yo soy Behemoth —dijo el de ojos ámbar, cruzándose de brazos.
 —Y yo soy Belfegor —añadió el de mirada fría.
 —Y sí —continuó Belfegor con una sonrisa torcida
—, el cabrón que te echó fue este. —
—Porque estabas hurgando donde no debías —resopló Behemoth sin mirarlo. El silencio que siguió fue incómodo, denso, pero también ridículamente absurdo. yo no pude evitar soltar una risa nerviosa, medio incrédula, medio desesperada.

 —Esto es surreal… —susurre, llevándome las manos a la cabeza. Los gemelos se miraron entre sí una vez más. Y como si la discusión nunca hubiera existido, Behemoth soltó un suspiro y dijo:
 —En fin… ya deja de hacerte el mártir. Sal. —¿Ah? —Vamos a cazar —intervino Belfegor, caminando hacia la puerta como si todo estuviera resuelto. 

 —¿Qué…? ¿Cazar qué? —Lo que sea que se deje —dijo Belfegor con una sonrisa torcida. —Y tú vienes con nosotros —añadió Behemoth desde la entrada. parpadee. Una hora atrás, me sentía como un trapo olvidado en una cama ajena. Ahora iba a ir de cacería con dos angeles, aun que tenian aureolas, unos grandes cuernos salian de su cabeza, que lo habían confundido durante días, que se gritaban como dos ancianas locas por un florero, y que medían lo suficiente como para asustar a cualquier cosa con sombra.
 —Estoy soñando… —murmure para mí mismo, sin moverme. Pero ya era tarde. Los dos lo miraban desde el umbral. Y el mundo, otra vez, estaba por cambiar.  
xx_h3len_xx
v3ilxx_

Creator

#boys_love

Comments (0)

See all
Add a comment

Recommendation for you

  • Invisible Boy

    Recommendation

    Invisible Boy

    LGBTQ+ 11.4k likes

  • Touch

    Recommendation

    Touch

    BL 15.5k likes

  • The Last Story

    Recommendation

    The Last Story

    GL 43 likes

  • Blood Moon

    Recommendation

    Blood Moon

    BL 47.6k likes

  • Secunda

    Recommendation

    Secunda

    Romance Fantasy 43.3k likes

  • What Makes a Monster

    Recommendation

    What Makes a Monster

    BL 75.3k likes

  • feeling lucky

    Feeling lucky

    Random series you may like

ANGELS [BL]
ANGELS [BL]

369 views4 subscribers

atravesando un campo de batalla cubierto de nieve teñida de sangre, rodeado de los cuerpos caídos de sus "compañeros". Descalzo y herido por el frío, observa cómo de la piel de los muertos brotan lirios asiáticos, símbolos de una extraña y mortal transformación.

ADVERTENCIAS: Temas muy delicados y explícitos (abuso sexual, maltrato, conductas autolesivas y más), escenas sexuales, violentas, sangrientas, tortura, etc.
Subscribe

9 episodes

VII

VII

31 views 0 likes 0 comments


Style
More
Like
List
Comment

Prev
Next

Full
Exit
0
0
Prev
Next