-¡Hey! ¡¿Ustedes qué están haciendo?! ¡Llamaré a la policía!

Dijo un chico que pasaba por ahí.

- ¡Oh no! ¡Nos descubrieron! ¡Corran!

Los brabucones inmediatamente huyeron de ese lugar, el chico anónimo se acercó a Austin.

-¿Estás bien?

-Sí, gracias.

Se levantó para irse, pero estaba adolorido por los golpes; por lo que volvió a caerse.

-Tranquilo, te ayudaré.

Este chico fue el más guapo que Austin había conocido . Él era rubio, pero con unas pequeñas partes tinturado de color rojo, sus ojos eran de color café. Y tenía las facciones como sus rasgos de su cara muy delicados.

Al sentir la calidez de una persona ayudándolo, Austin derramó algunas lágrimas, se aferró a él. Aunque no lo conocía tenía el sentimiento de que podía confiar en él. Por eso lloró desesperadamente en su hombro. 

El amable chico al ver Austin en ese estado, se compadeció de él y lo consoló con un fuerte abrazo.