Habían pasado poco más de dos semanas desde que comencé a salir con Ichigo-san.... y como sabrán él es el tío de uno de mis alumnos. Podría decir que nuestra relación no comenzó de la mejor manera, pero de alguna forma un egocéntrico oficinista y un profesor fundashi se habían enamorado....
Tiro un poco de mi corbata para aflojarla y aliviar el calor de los días de verano mientras espero fuera del minimarket en el que Ichigo-san y yo acostumbrábamos encontrarnos después del trabajo.
—Rihito-sensei! —escucho la voz de Ichigo-san quien corre a mi encuentro. No puedo evitar sonrojarme y ponerme emocionado de verlo —Perdón si me retrasé —se escusa mientras trata de recuperar la respiración —me tomó más tiempo del que esperaba.
—Descuida Ichigo-san lo entiendo, me pone muy feliz que seas dedicado en tu trabajo.
—No sonrías como un tonto —me jala de las mejillas —deja de ser tan comprensivo y moléstate un poco.
—Ahaha.
“De los dos Ichigo-san es el que para más ocupado con el trabajo, no me molesto porque confío en él... claro que me gustaría pasar más tiempo con él.... pero tampoco quiero ser una molestia, por eso estos encuentros después del trabajo son mis momentos más preciado del día”.
—Rihito-sensei... ¿Hoy te gustaría ir a cenar a mi casa? —pregunta Ichigo-san bajándome de las nubes.
—Aaammm me gustaría, pero ¿no crees que Kaoru pensará que es raro que invites a su profesor?
—Seguro que sí.... él debe pensar que nos llevamos mal ya que todavía no le he mencionado sobre “nosotros”.
Bajo la cabeza triste y él toma mi mano.
—No se lo digas, quizá se lo tome mal.
—No te pongas triste Rihito-sensei —él sonríe y me toma de la cabeza — ¿No crees que es emocionante tener una relación secreta? Además podemos decirle a Kaoru que ya nos llevamos bien, me gustaría poder pasar más tiempo contigo.
“¿Está animándome?”, mis mejillas me arden y asiento con la cabeza.
—Está bien, pero si quieres puedes venir a mi casa hoy por un momento —Ichigo-san me mira exaltado ya que era la primera vez que le invitaba a mi casa, él se pone demasiado rojo haciéndome avergonzar más —E...es solo que últimamente nos encontramos en este minimarket y quiero pasar un rato a solas contigo pero si no quieres está bien, puedo esperar otra oportunidad.
—No, no, no, está bien, yo también quiero estar a solas contigo Rihito-sensei desde esa vez no he podido si quiera besarte.
Mi corazón se acelera, una palabra más suya y podría saltar a sus labios y besarlo sin que me importase que el resto de la gente nos viese.... pero es la realidad, así que me apresuro a acelerar el paso y llevarlo a mi casa urgentemente.
“Soy un atrevido profesor”.
Ni bien llegamos a mi apartamento, abro la puerta y una vez cerrada esta, ambos nos quedamos en un total silencio.
— ¿Puedo besarte Rihito-sensei? —dice Ichigo-san acercando su rostro al mío, su respiración sobre mi piel hacen que me estremezca y me aferre a sus ropas arrugándolas.
— I...chi..ichigo-san —balbuceo, el me calla y comienza a besarme apasionadamente —ngh!
Yo también correspondo sus besos y dejo que me arrastre en su esencia. Ichigo suelta mis labios y jadea tratando de recuperar el aliento, pasa sus dedos entre mis cabellos y concentra su mirada azulada en mis ojos.
—Eres tan lindo Rihito-sensei que no puedo evitar perderme en tus ojos claros.
“También estaba fijándome en sus ojos”.
—A mí también me gustan tus ojos Ichigo-san.
“Ichigo-san es tan atractivo”,
“No puedo evitar sentirme tan rendido por él”
Le tironeo de su saco obligándolo a internarse en la sala, choco contra el sofá y ambos caemos en él, pero Ichigo-san me rodea con sus brazos acorralándome y vuelve a besarme.
—Te quiero Rihito-sensei.
“Yo también te quiero Ichigo-san”
—Creo que me he vuelto más pervertido por tu culpa —recrimino ocultando mi rostro con las manos.
—Ahaha —ríe —yo también —sonríe pícaramente y acerca sus labios a mi frente.
BESO!
—UWAAA!
“Me besó como a un niño”
—Eso es todo por hoy —se burla.
“¿Todo?”
— ¿Cómo que todo? —me quejo.
—Perdón Rihito-sensei debo ir nuevamente al minimarket a comprar los ingredientes para la cena de hoy, Kaoru regresará pronto a casa.
—Mmmmm —gimoteo.
Le acompaño hasta fuera del apartamento, y cierro. Cuando estamos cerca de la puerta principal del edificio vemos a un hombre de espaldas observando atentamente los nombres de los timbres. Ichigo-san se acerca al hombre y le pregunta si necesita ayuda, este voltea a verlo y luego se gira hacia mí dejándome petrificado.
—Rihito —dice mi padre.

Comments (2)
See all