>Yo

-La muerta

-Mirá quién se digna a aparecer después de tanto tiempo…

>Hey, hablamos seguido, no mientas.

-Sí, sólo cuando necesitás consejo de cómo pintar un mandala o como hacer un par de aros…

>Para mí eso cuenta.

-Me gusta cuando la conversación es más fluída. Viniste a escribir tus sueños, ¿no? Ni eso me compartís ya…

>Podés escuchar mi recuerdo

-Escuchar lo que pensás es muy confuso a veces.

>No creas que escribirlo va a hacer que esté más ordenado…

La cosa es esta, sucede cada vez que me voy a dormir meditando. Todos los sueños terminan teniendo en común a Saturno. Que estoy en sus anillos, que puedo ver la Tierra alejándose… ¡y ahora que como carne azul!

-¿Qué animal tiene carne azul?

>Que yo sepa ninguno, pero lo loco fue que no lo sacamos de un animal, era como que sacábamos un bloque de piedra donde adentro había un super pedazo de carne azul oscuro bien jugoso. Seríamos alrededor de 7 personas, y a pesar que el cubo tenía alrededor de 50x50cm y las lonjas las hacían de unos 10 cm, tenía la sensación que me iba a quedar con hambre de lo apetitosa que se veía.

-Okey. Quizás sea bueno empezar a relatarle estos sueños a tu psic.

>Si me estoy volviendo loca quiero darme el beneficio de la duda. Digo, no daño a nadie con esos sueños ¿Verdad?

-Verdad, pero no puedo opinar. Me supera. Quizás me gustaría tener más detalles. Mencionaste una nave, ¿Cómo era?

>Grande, luminosa, con un montón más de humanos. Más no recuerdo.

-También mencionaste los anillos.

>Si, y es muy loco, porque recordé que de chica tuve un sueño parecido. Esquiábamos en uno de los aros. Estaba cubierto de hielo, o era hielo puro, no recuerdo. Y se podían ver las lunas, pero muy chiquitas y casi como estrellas la mayoría.

-¿No estarás viendo muchos videos conspiranóicos?

>Siempre. ¡pero ninguno habla de Saturno!