Ha pasado un mes desde la desaparición de Leily, la investigación en torno al derrumbe de la mazmorra había concluido en un informe con resolución de indeterminado, pero Lero no tenía tiempo para su hija desaparecida puesto que su mayor preocupación ahora era la recepción de los pretendientes de su hija Niniel y futuro Rey del reino humano, de las cinco cartas que llegaron solo dos cumplieron con los estándares para candidato, el primer estándar y más importante era que el pretendiente tenía que ser y venir de un reino exclusivamente humano, el segundo requisito es que tenía que ser el hijo primogénito de la familia y por ultimo era que tenía que ser un bi elemental. El primer candidato en pasar la prueba fue Ezkiel Monde, primer príncipe del joven reino Kaledia, del cual han surgido una gran cantidad de habilidosos aventureros en el último tiempo. El segundo candidato en pasar la prueba fue Fleur Putier, único herededo del reino Dukos, del cual han surgido investigadores y exploradores de gran renombre.

 Lero de encontraba en su oficina analizando los informes económicos y demográficos del reino hasta que Prince toco la puerta

-       Mi Rey, con todo mi respeto le informo que el príncipe Ezkiel acaba de llegar al castillo

-       Perfecto, avísale a Niniel para que prepare y baje a recibirlos

-       Si mi Rey – Prince se alejó silenciosamente

 En la recepción del castillo estaban todas las criadas ordenadas en dos filas a los pies de la escalera mientras descendía Lero quien visualiza de inmediato a los invitados, primero se fijó en el caballero alto que se encuentra a la derecha, mucho más alto que el, quien ocupaba una corpulenta armadura de un intenso azul que le cubría todo el cuerpo, tenía detalles en verde lo cual le daba un toque de lujo pero también tenía diversas marcas por todas partes las cuales podía inferir se debían a las diversas batallas, podía suponer que debía ser un hábil guerrero pero no podía inferir en que arte ya que no veía su arma por ninguna parte. Luego al mirar a la izquierda nota una densa aura de lo que parecía ser el mayordomo, bastante mayor el cual vestía de manera formal y elegante, por último, mira al centro de ambas personas en donde ve a un joven de cabello verde pulcramente peinado hacia atrás, vestía un traje verde acorde a la situación, pero eso era todo, Lero no podía ver nada más que eso y su sonrisa, esa estúpida sonrisa que le incomodo desde el primer momento.

-       Mi Gran Rey, me presento ante usted de la manera más respetuosa que este pequeño ser puede – Ezkiel se arrodilla de manera ágil y elegante en reverencia al Rey

 Los dos hombres que acompañan a Ezkiel repiten sus acciones

-       Oh, joven que gracia y cortesía de tu parte, por favor, levántate y acompáñame al comedor. – Lero hizo una leve seña a Prince quien fue raudamente a buscar a Niniel

 Mientras tanto la habitación de Niniel estaba en el tercer piso del castillo en el extremo sur, ninguna sirvienta se acercaba a esta habitacion cuando Niniel estaba en ella, todos decían que estaba maldita, que había un espíritu en esta habitacion, pues pese a no haber nadie, siempre se sentía la misma energía escalofriante, y cuando se intentaban acercar, muchas se desmayaban, solo Prince podría acercarse y suponían que se debia a su gran experiencia y conocimiento de las diversas hartes que no era afectado por esta energía. En su interior está lleno de estantes con distintos libros y todos eran de una textura antigua, muchos lomos de cuero de distintas especies, pero lo que mas llamaba la atención era el librero del centro, el cual contenia diversos libros, todos antiguos, desgastados e ilegibles para los humanos, prácticamente ningún libro era de este mundo, menos de este tiempo, en el extremo izquierdo tenia los libros de historia de las dos anteriores eras a la actual, además de los libros que detallaban la historia de todas las generaciones de reyes de los distintos reinos del continente. En el extremo derecho se encuentran diversos libros de magia, desde los conceptos mágicos para poder sentir la energía, pasando por hechizos de combate de alto nivel, hasta libros que se creían perdidos, por último al fondo había un ventanal de piso a cielo el cual tenía vista hacia las montañas de Kedron, y que era perfecto para las inscripciones marcadas en sangre en donde se encontraba Niniel.

-       Bien joven aprendiz, con esta nueva runa podrás realizar maldiciones de alto nivel. La siguiente lección será sobre la ma…. – el ser se evaporo en el Aire

-       Señorita Niniel, el Rey solicita su presencia en el comedor de Inmediato

-       …

-       Por favor no demore joven princesa

 En lo que Prince se alejaba silenciosa y rápidamente, el misterioso ser volvió a emerger de las incripciones en el suelo, su esencia negra envolvía toda la habitacion provocando también que la temperatura descendiera varios grados, por toda su figura había un intenso rojo que asimilaba mucho una forma humana, pero esta fluia como un liquido espeso

-       Con paciencia y calma mi joven aprendiz, te transmitiré todo el conocimiento que tengo y serás la reina más poderosa – el ser emitía una fría sonrisa – ahora sigamos manteniendo la imagen

-       Si maestro – Niniel se levantaba calmadamente mientras se sacudía el polvo de su traje para acercarse a su ropero y sacar el vestido que su padre le había dejado para este día, era un vestido de gala amarillo con pequeños puntos que brillaban, también viene acompañado con un prendedor de plata con diferentes diamantes incrustados. Mientras se mira al espejo ajustando su vestido se detiene a mirar su rostro, su reflejo era el de una joven princesa que tenía todo el oro del mundo pero su rostro, sus expresiones, era el de alguien sin vida, sus ojos no tenían ningún brillo y sus labios estaban cerrados sin reflejar ninguna mueca.

-       Joven aprendiz, recuerde mantener la apariencia

 Ante la instrucción de su maestro Niniel uso sus dedos índices para mover la comisura de sus labios hacia arriba en una sonrisa y uso un hechizo para que en sus ojos reflejara algún brillo.

-       Perfecto, ahora, como regalo, extienda su mano – Niniel estiraba su mano hacia su maestro quien hacia emerger un brillante anillo negro con diversas gemas incrustadas de un rojo intenso – con esto me podras invocar donde me necesites.

 En el comedor estaba Lero con Ezkiel y su mayordomo charlando de las principales cualidades del reino cuando ven bajar a Niniel. 

-       Que belleza tan deslumbrante presencia mi mirada, de aquella flor reluciente que desciende desde los cielos hacia los impuros, no soy digno de tal magnificencia

Ezkiel hace una excéntrica y elegante referencia hacia Niniel mientras todos los demás lo miran, Lero no podía más con el enorme orgullo que sentía por la belleza que irradiaba su hija

-       Niniel, por favor, toma asiento a mi derecha, frente al Príncipe – Lero hace una seña para que Prince mueva el asiento

-       Gracias Padre – con la mirada fija en Ezkiel, Niniel toma haciendo delicadamente

-       Bueno, ahora que estamos todos, Ezkiel por favor, cuéntanos de tu familia

-       Por supuesto mi Rey, como saben vengo del reino Kaledia, una ciudad ubicada en el centro de Prairene y 100% humana, mi padre, Tiror primero y mi madre Anis Strol son ex aventureros de rango Omicron, como soy hijo único fui educado y entrenado para ser la perfección andante. – Ezkiel toma un pequeño bocado de comida – nos enorgullece decir que además tenemos grandes académicos en las artes de la guerra, pero a diferencia de usted mi Rey – blandea hábilmente el tenedor – somos expertos en el uso de la lanza a una y dos manos.

-       Oh, que interesante, Prince, mañana coordina un entrenamiento de practica con el joven Ezkiel, quiero ver esa habilidad

-       Si mi Rey

El resto de la noche transcurre en total normalidad con un Ezkiel aprovechando cada oportunidad para relucir sus dotes y alabar al Rey.

A la mañana siguiente en el castillo real estaba el Rey Lero con su indumentaria de combate que consistía en una delgada armadura de Plats con diversos adornos extravagantes, haciéndolo más vistoso que útil, como arma sostenía una espada que debía sostener a dos manos por su forma, pero con gran habilidad solo usaba una mano para empuñarla, la hoja era de un color negro azabache  totalmente pulida y opaca, en la empuñadura había diversos escritos ilegibles debido al uso el cual, no cuadraba con los tiempos actuales. Por el otro lado estaba Ezkiel y su mayordomo que le sostenía las dos lanzas disponibles, una lanza corta y liviana, ideal para una mano la cual su hoja tenía una serie de cortes en sierra color café, la empuñadora por la parte superior cubría totalmente la mano del joven príncipe, por otro lado, la segunda lanza era una bastante larga y pesada, la cual consistía en un alma de obus turquesa, en la punta tenía una hoja también de obus carmesís en punta de flecha.

-       Joven Ezkiel, ¿estarás bien esa armadura tan sencilla?

-       No se preocupe mi Rey, esto es más que suficiente – Ezkiel lo miraba desafiante

-       Perfecto, Prince, alza la barrera, Ezkiel las reglas serán lo siguiente, podremos usar todas nuestras habilidades y no necesitas contenerte, en esta zona hay un escudo especial que se activa al atacar las partes vitales – Lero señala cuatro puntos del cuadrilátero – por último, ganara quien logre hacer que el primero se rinda o que su espalda toque el suelo

-       Me parece perfecto mi Rey – Ezkiel escoge la lanza de dos manos

Lero le da la señal a Prince quien activa la barrera alrededor del campo y por unos minutos todo esta quieto, pero el primero en moverse es Ezkiel quien, en un movimiento amplio y ágil, balancea la lanza directo hacia la cabeza de Lero, la cual pasa de largo para sorpresa de Ezkiel quien sale volando varios metros. Al levantarse ve como Lero sigue en el lugar inicial sin despeinarse.

-       Si eso es todo lo que tienes mocoso, no eres digno de mi hija

-       Solo estoy calentando mi Rey