Había llevado otra muda de ropa.
Me cambié dentro de la barrera y revisé que no hubiera ni una sola gota de sangre en mi mochila.
Una vez que lo verifiqué, desaté el cuerpo de Esteban.
La soga la metí en una bolsa de plástico y lo quemé.
Desactivé mi barrera.
Era bueno que no se oyera nada desde el exterior.
Cambié mi forma.
Parecía que mi anterior cuerpo cada vez se estaba yendo.
***
No pasó mucho tiempo.
Me imaginaba que esto pasaría, así que me fui a una tienda a comer uno de mis postres favoritos.
Helado.
Me tardé mucho en decidir alguno.
Pero al final, tomé uno de fresa.
Al parecer era raro que un chico tomara un helado de fresa por lo sorprendido que estaba el cajero.
'¿Enserio?' pensé.
Una vez que pagué, me fui lo más rápido al apartamento.
Si quería seguir con mi fachada de buen estudiante, debía hacer mis deberes.
Al parecer Emma no había llegado de su trabajo, así que entré sin apresurarme.
Me duché, era bastante refrescante ahora que me había deshecho de ese bastardo.
"¿Te gustó como quedó Día?" le pregunté.
"¡Sí!, aunque hubiera estado mejor si durara un poco más, se lo merecía" gritó Día.
"Seh, pensé que tardaría más" murmuré.
'Los siguientes son sus subordinados, pero no quiero torturarlos, apenas muestren el cuerpo de Esteban a sus amigos y familiares para que lo reconozcan sabrán que son los siguientes' pensé.
***
Pov de Gabi (subordinado de Esteban).
'Parece que, de alguna manera, Alex no Murió' pensé.
El maestro seguía hablando mientras dibujaba algún garabato en mi libreta.
‘Esteban hoy está raro’
Al terminar la clase, salí y vi a Esteban con Alex.
Se veía inquieto.
Le mandé un mensaje en su teléfono.
No contestó.
Era bastante raro, siempre veía los mensajes apenas llegaban.
Aparte, nunca lo había visto asustado.
Los seguí.
Se fueron en una zona bastante poblada.
Traté de seguirlos lo más cerca posible.
No pude.
Los perdí de vista a mitad de la calle.
‘¿Qué está pasando?’
***
Pov de Alex.
Era sábado.
En la mañana no hice absolutamente nada.
‘Aburrido’ pensé.
Decidí bajar.
Emma estaba viendo las noticias con un rostro estupefacto y angustiado.
“Alex, trata de no llegar tan tarde de ahora en adelante, es peligroso” dijo Emma.
‘¿Cuándo se dio cuenta?’ pensé sorprendido. ‘Las mujeres dan miedo’
Vi la televisión en ese mismo momento.
“Alrededor de las 6 de la tarde, tres hombres de mediana edad fueron brutalmente asesinados en la calle XX en la ciudad 3, aún se busca al asesino. Al mismo tiempo, en una colina, se hallaron rastros de sangre aún no identificada. Se recomienda que los civiles no ronden a altas horas de la noche y regresen a sus propiedades terminando sus actividades” dijo el presentador.
Me sorprendió lo rápido que se convirtió en noticia la muerte de esos hombres.
Pero esto dificultaría mi objetivo.
Probablemente ya no habría tantos robos o secuestros a esas horas.
Tendría que dejar la escuela para hacer mis rondas.
‘Tal vez pueda hacer eso’ pensé.
***
El domingo fue un día de planeación.
Salí a escondidas de Emma por la noche.
Había personas despreocupadas paseando por las calles.
Eran las 11.
‘Por más que se les diga, no hacen caso’ pensé.
Vi a lo lejos una persona familiar.
Era uno de los subordinados de Esteban. Erick.
Estaba con una chica.
Esta no parecía cómoda a su lado.
‘Perfecto’
Activé mi otra forma y los seguí con ‘sigilo’.
“Vamos Wendy, solo te llevaré a tu casa, sabes que ya tiene tiempo que no veo a tus padres” dijo Erick.
“N-no, déjame, sabes porque no te quiero ni tocar, si mis padres descubren…” tomó un respiro y prosiguió. “Me echarán de la casa”
‘Oh, que interesante’
A pesar de la buena apariencia de Erick con sus hombros anchos, cejas pobladas, cabello ligeramente rizado pelirrojo y su alta estatura, su mirada era de un depredador que atemorizaba a todos.
Incluyéndome hasta hace unos días.
La chica era bastante guapa; cabello hasta los hombros de un color castaño claro, un rostro ovalado, con curvas en los lugares correctos y unas piernas largas.
‘Pensar que una chica como ella se metiera con Erick, pfff, que ridiculez’
Cuando llegaron a una casa de color beige, me acerqué a ellos y desactivé sigilo.
“Buenas noches jóvenes, espero que no les moleste que los acompañe” dije.
Si iba a jugar un poco, iniciemos con esto.
“¿Quién eres?” preguntó Erick.
“Un conocido de esta jovencita, ¿verdad?” dije sonriendo.
Al parecer, la chica captó lo que me refería. Con cautela se acercó a mí. Aun tenía mi otra forma.
“S-sí, es un conocido mío Erick” dijo.
“¿Una persona que parece demonio?, ¿te has convertido en una bruja o qué?” escupió.
“Wendy, entra a tu casa, si tiene cámaras de vigilancia aquí en la entrada, quiero que elimines todo esto y digas que fue un fallo” le murmuré mientras pasaba a mi lado.
Ella siguió y entró a su casa.
“Bien, bien, Erick, vamos a un lugar mejor” dije aun con mi sonrisa.
Lo agarré del cuello y me lo llevé volando.
“¡¡SUELTAME ENFERMO DE MI*RDA!!” gritó.
‘Lo bueno es que la gente es ignorante’ pensé al ver a todas las personas debajo de mí.
Lo llevé al mismo lugar en donde había dejado a Esteban.
Su cuerpo ya estaba lleno de moscas y otros animales.
Ninguna persona lo había notado aún.
“¿Lo reconoces?” pregunté.
“¿Esteban?”
“Ujum” mientras veía como Erick se quería escapar, agarré una linterna que había dejado aquí.
Todo estaba listo. Oculto en donde ni siquiera una persona imaginaría.
“¿Ahora si me reconoces?” le dije mientras la linterna apuntaba mi rostro.
Erick tenía una cara horrorizada.
***
Pov de Erick.
‘No puede ser, lo que me había dicho Esteban era verdad, es un demonio’ pensé.
Había mirado a mi alrededor.
No había más que oscuridad.
“Vamos, vamos, no seas una nenita” dijo Alex.
Una barrera oscura se formó a nuestro alrededor.
Lo golpee. Era tan duro como una pared.
Miré hacia arriba. Ni un agujero había.
Miré de nuevo a Alex.
"¿Q-qué quieres de mí?" dije.
"Solo advertirte jeje" la sonrisa de Alex estaba más amplia.
'Está mintiendo' pensé.
Se acercaba lentamente.
Traté de alejarme lo más que pudiera. Rápidamente había topado con la barrera.
Era como si se hiciera más pequeño el espacio en donde nos rodeaba la barrera con cada paso que daba.
Me sentía asfixiado una vez que se acercó lo suficientemente cerca como para matarme.
"Cuando lleguemos a la escuela, dile al maestro todo lo que me hicieron durante estos años, con detalles incluidos y tráiganlo a este lugar" murmuró.
Sus palabras se quedaron grabadas en mi cabeza.
Me quedé inmóvil.
Ante mis ojos, aquel demonio disfrazado de Alex, desapareció.
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