Este es un sentido homenaje a todas aquellas pelotas de fútbol, que nos acompañaron en estos tan bellos momentos de esparcimiento deportivo, pero que por errores técnicos, designios del destino, o mala voluntad de vecinas que no entienden lo que es la diversión, pasaron a otro plano de la existencia. No, no es necesario decirles "vuela alto" , porque eso lo hicieron en vida.
¡Nunca las olvidaremos!
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